Está claro que no es un partido más. Que la picante previa jugará su propio duelo. Que no hay solo un pasaje a los cuartos del Clausura en juego, sino una lucha de poderes, establecida en la guerra ideológica de la AFA contra Estudiantes. Que será un cruce que unirá todo lo que pasó en este tiempo: el fuego cruzado mediático, los fallos arbitrales polémicos y toda la disputa principalmente desde que Verón quiso impone la idea de los capitales privados, algo a lo que el sistema de la entidad madre del fútbol argentino se opone.
Y como si fuera poco, en la previa del choque contra River, el presidente de Estudiantes dejó un claro mensaje en sus redes. Es la imagen de un puño cerrado y en alto, que no es un símbolo más. Es el que identifica, por ejemplo, a un luchador como Nelson Mandela. Es uno que refiere a la resistencia, a la lucha por un ideal, a enfrentar a un poderosa fuerza institucional (en este caso, la AFA). Y el “Dale hoy”, con el que también bajó línea.

La fuerza de ese gesto tomó esa connotación sobre todo cuando Mandela fue liberado de la presión en 1990, luego de 27 años. Fue un ícono poderoso que simbolizó su lucha contra el apartheid y la liberación del primer presidente negro elegido en las primeras elecciones multirraciales (y por ende democráticas) de ese país.

El mensaje de Verón a los jugadores
Más allá de lo que es historia pura, lo que acá trasciende es el símbolo del puño apretado y en alto que eligió Verón para marcar su presencia y su posición en la previa al partido. Les está pidiendo a los jugadores que planten bandera, que resistan, que no se entreguen, que luchen por una causa, en este caso, la de Estudiantes. Porque más allá de estar en juego el pasaje, también está claro que es una cuestión de orgullo, de pelear por un ideal, por una bandera.

Por eso, la posición del equipo de cara al pasillo que lo obligó a hacer la AFA también marcará un poco esta situación. El tema ya fue motivo de charla, como contó Cielosports en estas horas. “De espaldas y de brazos cruzados”, fue la idea que propuso alguien a la hora de pensar en cómo hacer el pasillo. Más allá de cualquier sugerencia, está claro que la postura del club es no hacer pasillo, pero los jugadores serán quienes tomarán la decisión final. Sin Ascacibar ni Carrillo, que bien podrían absorber la presión, qué decisión prevalecerá…

