Habrá que buscar en los libros un casi así. El de un técnico que estuvo tres veces muy cerca de que su ciclo se acabara y que, al fin de cuentas, termina alzando la Copa, siendo reconocido por toda la gente y definitivamente metido en la historia grande del club: porque con este cuarto título, se puso a tiro de Osvaldo Zubeldía, el más ganador con seis. Y encima, el próximo finde tiene una final más, en la que puede buscar su quinto título.
Está claro que el Barba ya marcó la historia grande del club. Ganó la Copa Argentina 2023, un torneo que al Pincha se le negaba sistemáticamente, la Copa de la Liga 2024, el Trofeo de Campeones 2024 y ahora mismo el Clausura 2025. Tendrá, ante Platense, el próximo sábado en el estado Único de San Nicolás, la chance de sumar otra estrella.
Apenas terminó el partido, Domínguez estalló de felicidad con una sonrisa que sin dudas refleja su conquista. Otra vez lo hizo. En este caso, renaciendo de sus cenizas, para dejar en claro que su ciclo sigue vivo. Y que ahora va por la revancha en la Libertadores 2026.
Porque si hay algo que se ganó Domínguez fue la renovación. Y el propio Verón, que fue a buscar al DT y se fundió en un abrazo con él, dejó en claro que se sentarán con el entrenador a negociar su nuevo contrato. De hecho, la gente lo pidió: “El Barba no se va, el Barba no se va…”.
¿Qué dijo Verón de la continuidad de Domínguez?
“Ahora tenemos un partido. Me parece que nos tenemos que enfocar en eso y luego del partido obviamente ver un poco lo decía, esto de sentarnos, porque los desafíos por delante son distintos. Las exigencias son más. Y me parece que para afrontar eso todos tenemos que reflexionar e ir poniéndonos por delante sobre todo objetivos para poder abordar esos lugares que son importantes. Reinventarse en el fútbol argentino es difícil y hay que trabajar sobre eso”, dijo la Bruja.

