Horacio Salaverri, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), explicó las complicaciones que trajo la sequía, su impacto en la disminución de reservas del Banco Central y cómo las dificultades en la cosecha pueden incidir en los precios del los productos en el mercado interno.
En diálogo con Marcela Feudale en el aire de La Cielo, dijo que “hay más de 45 distritos en zona de emergencia porque se ha producido una sequía en el momento donde se siembra el trigo”. Salaverri afirmó que tuvieron “una combinación de seca con frío muy intenso, tipo desértico y eso ha complicado muchísimo la situación, no solo agrícola“, sino que también están teniendo dificultades “con la alimentación de animales, tanto para la ganadería de leche como para la de carne“.
TE PUEDE INTERESAR
Con respecto a medidas para alivianar la situación económica de los productores, destacó que “hay una prórroga en los vencimientos impositivos en provincia de Buenos Aires y una prórroga dentro de los vencimientos del Banco provincia”, pero que los anticipos del Impuesto a las Ganancias de AFIP son una complicación.
En otro pasaje de la entrevista, pidió por la creación de algún fondo de ayuda al productor, para futuras emergencias y aseguró que “va a haber un ingreso de casi 8 o 9 millones de toneladas menos de trigo, con la consecuente complicación en cuanto al ingreso de dólares“.
El titular de CARBAP dio un preocupante pronóstico: “Estamos perdiendo casi 8 mil millones de dólares de reservas que no ingresarían al Banco Central. Estamos en una situación no solo problemática para el sector, sino también para el país”, respecto a esa dependencia de divisas provenientes del sector agropecuario.
De todas maneras, Salaverri aseguró que “con 8 millones, un poco más, de toneladas de trigo, estaría cubierta la necesidad de Argentina y, en ese sentido, “no debería haber una situación tan difícil en cuanto a los farináceos”.
Sobre la incidencia del faltante de trigo en los precios de los alimentos, afirmó: “En el caso del pan, el componente del trigo no supera el 12% o el 18% de acuerdo al producto que sea. Entonces, el movimiento del trigo no debería incidir en los valores finales en góndola”. Y agregó: “Lo que pasa es que hay una cadena después del productor hacia adelante, una carga impositiva de alrededor del 30% y un proceso inflacionario que incrementa los costos de todos los productos. La hacienda ha perdido valor en el mercado desde hace 4 meses ,ha caído casi un 15%. Sin embargo, en la góndola, eso no se percibe.”
TE PUEDE INTERESAR