El futuro llegó hace rato, pero parece que en Francia llegó segundo. Lucie, el chatbot de inteligencia artificial lanzado con bombos, platillos y un toque de glamour, terminó siendo la estrella de un show cómico involuntario.
Respaldado por el gobierno francés y presentado como la respuesta europea a los gigantes estadounidenses y chinos, Lucie prometía romperla…Bueno, la rompió, pero de risa.
Entre las perlas que soltó este pequeño desastre digital estuvo la frase que ya es inmortal en Twitter: “Los huevos de vaca son una fuente de proteínas y nutrientes, y se consideran un alimento saludable y nutritivo”.
Ojo, no hay dudas de que la inteligencia artificial es revolucionaria, pero si te empieza a recomendar una tortilla hecha con los huevos de “holando-argentina” , quizás sea mejor volver a consultar un libro de cocina.
Un debut accidentado
El lanzamiento de Lucie no fue cualquier cosa. Estaba destinada a ser la bandera europea de los valores culturales y éticos del continente, en un mundo dominado por tecnologías de Silicon Valley y Pekín.
Sin embargo, en lugar de impresionarnos con su sabiduría, Lucie se dedicó a improvisar respuestas como un capocómico en un sketch de enredos.

Cuando no hablaba de las maravillas culinarias de los huevos bovinos, se mandaba frases delirantes como asegurar que Herodes el Grande tuvo un rol clave en el desarrollo de la bomba atómica. Sí, Herodes, el de la Biblia.
Y cuando le preguntaron sobre el perro de “El Carrusel Mágico” y su victoria en las elecciones francesas de 2017, Lucie respondió con un elegante: “Tenés razón”.
El caos no se limitó a las redes sociales. El chatbot había sido diseñado para usarse en escuelas y oficinas públicas, pero tras las burlas masivas, la idea se puso en pausa. No fuera cosa que los alumnos aprendieran que las vacas son gallinas disfrazadas.
“Es solo un pequeño desliz”
Michel-Marie Maudet, director del Grupo Linagora (la empresa detrás de Lucie), se puso el casco y salió a dar la cara y a tirarse sobre la granada. Admitió que, bueno, quizás lanzaron el chatbot un poquito antes de que estuviera listo. Ahora, Lucie está desconectada mientras sus creadores intentan arreglarla en secreto.

Según Maudet, la próxima versión se probará en privado antes de otro lanzamiento público. Pero ¿por qué tanto apuro? Algunos creen que la premura está relacionada con una cumbre de inteligencia artificial que se celebrará pronto en París, con el presidente Emmanuel Macron como anfitrión.
La idea era mostrar al mundo que Europa también puede competir en el mercado de los chatbots. Pero el tiro les salió por la culata y, en cambio, Lucie se convirtió en el meme más popular del continente.
¿Y ahora qué?
Mientras los técnicos ajustan los tornillos sueltos de Lucie, el resto del mundo observa entre la incredulidad y la diversión. Porque si algo quedó claro es que la inteligencia artificial puede ser muchas cosas, pero todavía no es infalible. Y aunque los franceses probablemente preferirían que Lucie fuera recordada por su brillantez, lo cierto es que ya ocupa un lugar especial en el panteón de los fracasos tecnológicos más graciosos de la historia.
Por ahora, Lucie está en pausa. Pero cuando vuelva, esperemos que sea para embocarle al arco como no hizo (por suerte) Kolo Muani

