Eduardo Valdés, actual diputado nacional, fue el representante argentino en el Vaticano entre 2014 y 2015, lo que no sólo le permitió conocer de cerca la humildad y accionar de Bergoglio, sino que además le dio la oportunidad de ser artífice del cónclave que cualquier argentino puede desear.
Fue en el marco de los Partidos por la Paz impulsados por el Sumo Pontífice que, en un principio fueron organizados por el “Pupi” Zanetti quien por aquellos años era una figura destacada en el Inter de Italia, aunque esto no había sido un impedimento para que el astro del fútbol lo dejara afuera del Mundial en el 2010 y esas esquirlas llegaron hasta el Vaticano, al menos así lo relató Eduardo Valdés en el micrófono de FM Cielo, en diálogo con el programa “Palabras más, palabras menos”.
“Le traía la lista y nunca estaba Maradona y el Papa le preguntaba: ‘¿Y Maradona?’, ‘Bueno, sí, todavía no me contestó, que esto y lo otro’, hasta que un día se dio cuenta el Papa que no era por el lado de Zanetti que iba a conseguir a Maradona”.
Consultado sobre si el Papa había notado alguna reticencia por parte del Pupi, Valdés fue contundente: “Era lógico porque Maradona lo había dejado afuera Zanetti en el Mundial de Sudáfrica, Zanetti no movía un dedo a favor de Maradona. Y el Papa nos llamó a Guillermo Moreno y a mí para que lo ayudáramos a conseguir a Maradona”.
“Y la verdad es que cuando tomé contacto con Maradona tenía una predisposición de conocer a Francisco extraordinaria y viajó”, contó Valdés sobre ese primer encuentro que se dio en conjunto con todos los jugadores en el aula Paulo VI. “Al día siguiente Diego me dice que necesitaba volver a hablar con el Papa porque le había pasado algo muy especial”.
La confesión de Diego a Valdés. “Cuando él me saludó, me agarró de la cintura y me dijo: ‘Diego, lo necesito, lo necesito para pelear por la paz del mundo y contra el hambre. ¿Me ayuda?’ Eduardo, yo cerré los ojos y sentí que estuve con mi mamá en el cielo y con él en la tierra. No me pasó nunca, nunca. Ayúdame que quiero volver a verlo porque este es un tipo distinto.”
“Y al día siguiente el Papa lo recibió 2 horas a Diego, yo lo acompañé. Fueron dos horas extraordinarias, donde él le pidió entre otras cosas si lo ayudaba y le bautizaba a su hijito que acababa de nacer, tenía 6 meses de vida, Diego Fernando. El papa le dijo que sí, con mucho gusto. Le dijo: ‘Venga con todos sus hijos’.
El Mundial por la Paz de Maradona: El “Pupi” vs. Diego
“Era el equipo de Maradona contra el equipo de Zanetti. Todos jugaban un tiempo, lo habían acordado así porque eran como 40 convocados. Y lo único que había pedido Diego era que no quería que jugara (Mauro) Icardi, que estaba entre los convocados. Entonces, cuando termina el primer tiempo que Maradona tiene que salir, Zanetti aprovecha y pone en su equipo en el segundo tiempo a Icardi”, cuenta Valdés a FM Cielo anticipando lo que sigue.
“Pero Maradona cuando vio que entraba Icardi, lo agarró al técnico del equipo de él que era un inglés y le decía: ‘No change, no change’, como diciendo, ‘Yo no cambio, yo no cambio’, y entró al segundo tiempo”, relató el entonces Embajador argentino en el Vaticano al tiempo que destacó que siendo el de mayor edad y con sobrepeso, Diego jugó los 90 minutos.
“El equipo de él en el primer tiempo iba ganando 1 a 0 con un gran pase de él a Roberto Baggios y perdieron tres a uno con tres goles de Icardi, la bronca que tenía Maradona, las cosas que decía, decía que habían roto los los códigos”, recordó Valdés.
El 10 también se peleó con la Brujita Verón, así lo recordó uno de los oyentes de FM Cielo y Valdés confirmó: “Ese es el segundo partido del mundial por la paz, en el primero se pelea con Icardi. Verón no estaba en el primer partido”, aunque remarca que finalizado el encuentro “terminaron abrazados, ahí en la cancha”.
“A mí me gustaba porque Diego estaba en toda una jornada pacifista, pero cuando empezaba el partido, él lo quería ganar como si jugara a la final del mundo”, concluyó Valdés.