Eran dos ambientalistas muy jóvenes pertenecientes al movimiento denominado “Just Stop Oil” e ingresaron como si fueran turistas a la Galería Nacional de Londres este viernes para arrojar sopa de tomate (¿frío?) de la afamada marca estadounidense “Heinz“, sobre la obra maestra titulada “Los Girasoles” del afamado pintor holandés Vincent Van Gogh, para protestar contra la explotación de yacimientos de combustibles fósiles en Reino Unido.
Según los reportes del museo solamente causaron daños menores al marco, gracias a la protección de vidrio que tienen este tipo de cuadros tan famosos mundialmente.
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Según imágenes de prensa publicadas por el movimiento y viralizadas en redes sociales, los dos activistas que arrojaron sobre la obra el contenido de esas dos latas de sopa, piden el cese inmediato de cualquier nuevo proyecto petrolero o gasífero.
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El precio estimado de la obra de arte está en el orden de 84 millones de dólares.
La policía acudió “rápidamente a la sala de la Galería Nacional en la mañana del 14 de octubre, después de que dos manifestantes arrojaron una sustancia a una pintura y luego la pegaron a una pared”, según informó Scoltland Yard por medio de un comunicado.
AHORA TOMARÁN SOPA ENTRE REJAS
De acuerdo a la información proveniente de Londres, las activistas fueron arrestadas por el delito de “degradación”.
El museo dijo en un comunicado que dos personas “parecieron pegarse a la pared adyacente a los Girasoles de Van Gogh (pintado en 1888)” y también “arrojaron una sustancia roja, que parece ser sopa de tomate, sobre la pintura”.
El marco sufrió “daños menores” pero la pintura está “intacta”, aseguraron desde la Galería Nacional.
Esta nueva acción del colectivo ecologista, que ya había apuntado en el pasado a obras de arte, se enmarca en un mes de actuaciones en el que también bloquearon carreteras en varias ocasiones.
“La crisis del costo de vida proviene de los combustibles fósiles. La vida cotidiana se volvió inaccesible para millones de familias que tienen frío y hambre. Ni siquiera pueden pagar una lata de sopa”, dijo Phoebe Plummer, activista del movimiento citada en un comunicado con sus jóvenes 21 años.
“¿Vale más el arte que la vida? ¿Más que comida? ¿Más que justicia? La crisis del costo de vida y la crisis climática está impulsada por el petróleo y el gas”, postearon en el mensaje.
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