En medio de la parálisis de la obra pública a nivel nacional desde el 10 de diciembre cuando asumió el libertario Javier Milei, un intendente del conurbano anunció que su Comuna culminará con fondos propios la obra de una escuela que había quedado paralizada.
El intendente de Almirante Brown, Mariano Cascallares, comunicó que el Municipio utilizará recursos propios para reanudar y finalizar la construcción del segundo edificio de aulas del Instituto Superior de Formación Docente (ISFD) N° 41, una obra que hasta diciembre pasado era ejecutada con fondos nacionales.
Cascallares realizó el anuncio durante una reunión con miembros de la comunidad educativa y funcionarios municipales. Allí, el intendente informó que tomó la decisión de continuar con la obra que tiene un avance de poco más de 20 por ciento y aportar los recursos necesarios para finalizarla.
Asimismo, señaló que una vez resuelta la transferencia de responsabilidad de financiamiento de la Nación a la Comuna, la obra se pondrá en marcha y su plazo de ejecución será de alrededor de nueve meses.
“Siempre fue muy importante trabajar con el sistema educativo y por ello desde el Municipio seguimos apostando por la enseñanza pública con fuertes inversiones”, dijo.
Asimismo, remarcó “el compromiso hacia la comunidad educativa que en todo momento confió en la gestión municipal para hallar respuesta a sus necesidades”, en este caso para la continuidad de la construcción del nuevo edificio y ampliación de la Institución.
El edificio será utilizado por miles de estudiantes en los profesorados de Ciencias Naturales (física, química y biología), Lengua, Inglés, Ciencias Sociales (historia, geografía), matemática y Filosofía.
En otro plano, se informó que el segundo edificio es una obra complementaria al existente Instituto Superior de Formación Docente (ISFD) N°41, y actualmente tiene un avance mayor al 21 por ciento.
El mismo contará con diez aulas, tres laboratorios, un office, una dependencia, una sala para maestranza, una oficina administrativa/de fotocopiado, un auditorio, una biblioteca, dos salas de profesores y núcleos sanitarios y de circulación vertical. Todo distribuido en planta baja, 1° y 2° piso.
Además, el nuevo edificio se vinculará con la edificación existente con una vereda conectora, y con el espacio verde no solo a través de su forma volumétrica sino de su fachada permeable. Se construirán un total de 1810 m2 cubiertos, con 603 m2 por planta (planta baja, 1° piso y 2° piso), y 220 m2 de vereda.
El espacio exterior contará con veredas de acceso y será iluminado mediante columnas de alumbrado público tipo LED y la fachada del inmueble con reflectores de alta potencia. También habrá equipamiento urbano, tales como bancos y cestos de residuos.



