Durante el acto que la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner encabezó hoy en Las Flores por la apertura de un nuevo espacio de la memoria, tuvo un momento que seguramente circulará en los medios y las redes sociales aún más que los demás fragmentos ligados al acto en sí mismo.
Se trata de la ocasión en que habló de su gusto personal, y el de su familia, por tomarse vacaciones en los Estados Unidos de América, específicamente en Nueva York y Orlando.
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Tal como lo cuenta en su libro “Sinceramente”, la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner explicó el placer que le producía a Néstor Kirchner ir a Disney World, y como gozaba de esos momentos en aquel país.
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El gobierno reaccionó tras la derrota en Buenos Aires con una mesa política nacional, pero los protagonistas principales siguen siendo los mismos.
El motivo de volver a hacer referencia a este hecho personal fue para explicar que no existe en ella un sesgo, o “anteojeras ideológicas”, que le impidan relacionarse con la potencia mundial más importante del mundo capitalista, sino que conoce la diferencia entre disfrutar de sus beneficios pero sin entregarle la soberanía al momento de representar los intereses de la República.
“Néstor y yo de vacaciones a Beijing y a Moscú no no fuimos nunca”, inició el particular instante de confesión familiar íntima, Cristina Kirchner.
“¿Saben dónde íbamos Néstor Kirchner, mis hijos y yo de vacaciones?… A Nueva York y a Orlando, si si, a Disney World, a Néstor le encantaba, disfrutaba como un chico” contó, luego de felicitar por haber leido su libro a uno de los asistentes que desde una de las sillas, ubicadas en el acto de Las Flores, había contestado con un grito a la pregunta retórica de la Vicepresidenta: “A Nueva York”.
Después continuó explicando: “Si, no tenemos problemas con los Estados Unidos. No tenemos anteojeras ideológicas. Muchachos y muchachas dejense de joder con esto de que los comunistas y todo eso“, haciendo referencias a las permanentes acusaciones que desde la oposición y los movimientos “libertarios” le realizan en cada toma de decisión del gobierno.
Cristina Kirchner dio el ejemplo de las vacaciones en familia con Néstor en Disney, para explicar que no tiene sesgo ideológico “comunista”
“Lo que pasa es que nunca confundimos nuestros gustos y preferencias personales con los intereses nacionales, como hacen otros”, agregó Cristina Kirchner, supuestamente aludiendo al gabinete que precedió al actual, en el Gobierno Nacional.
Ya sobre los aplausos, Cristina cerró arengando: “Y ojo, eh, ojo. Aunque me guste Nueva York yo sé cómo tengo que defender los intereses de la República Argentina. Ojo, eh, ojo. Son dos cosas que no tienen que ver. No confundan el durazno con la pelusa”
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