En otra demostración de unidad, las dos CTA anunciaron una nueva jornada de lucha. Esta vez será para reclamar los fondos que el Gobierno Nacional le recortó a la provincia de Buenos Aires tras una negociación paritaria compleja. Podría haber paro de actividades.
Según se informó oficialmente, el jueves 22 de mayo ambas centrales obreras van a hacer una jornada nacional de lucha que incluirá una marcha al Ministerio de Economía. La idea es reclamar “por paritarias libres, aumento del Salario Mínimo, Vital y Móvil junto a los programas sociales, por la devolución de recursos a las provincias y contra el desmantelamiento de las políticas públicas“, enumeraron desde la CTA Autónoma.
La CTERA, confederación de sindicatos docentes, confirmó su adhesión a la medida de fuerza con un pliego de demandas propio. Vale recordar que vienen de pedir la convocatoria a paritaria nacional y todavía no obtuvieron respuestas. Si bien la jornada de lucha incluirá paro y movilizaciones, la dirigencia gremial de cada provincia va a definir la modalidad por lo que todavía no está claro si ese jueves habrá clases en las escuelas bonaerenses o no.
Lo cierto es que en la provincia de Buenos Aires los sindicatos de trabajadores estatales ya confirmaron asistencia. Ayer, hicieron un plenario de secretarios generales en Ensenada en el que decidieron participar de la movilización del 22 de mayo. “Nos movilizaremos para exigirle al gobierno nacional los $9.400 billones que le debe de coparticipación a los bonaerenses”, aseguró el líder del SUTEBA, Roberto Baradel.
La noticia fue recibida con beneplácito en el gobierno bonaerense. De hecho, el ministro de Trabajo, Walter Correa, estuvo en la apertura del plenario regional y celebró “el apoyo al gobernador Kicillof frente a los legítimos reclamos presupuestarios” que expresaron las centrales obreras.
Por su parte, el gobierno bonaerense de Axel Kicillof viene denunciando el recorte ilegal de fondos desde el comienzo. Ya hay demandas presentadas ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, notas en la cartera de Luis Caputo y pedidos de informe en el Congreso. Según cifras oficiales, en 2024 el Estado bonaerense perdió el equivalente a un cuarto de su presupuesto entre fondos que no recibió y proyectos paralizados.