Mientras algunas organizaciones del campo se ponen en pie de guerra, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, teje alianzas en el sector agropecuario. Días atrás, recibió a la Mesa Agroalimentaria Argentina (MAA) conformada por un grupo de entidades rurales vinculadas a las cooperativas productoras de alimentos. Respaldo y críticas a Milei.
Diego Montón, uno de los referentes de la agrupación, contó que el encuentro sirvió para mostrarle al mandatario un análisis de la situación que atraviesan los pequeños productores de alimentos. Según indicaron, “el ajuste profundizó la concentración agroalimentaria, perjudicando productores de alimento y aumentando el hambre“. También se mostraron preocupados por la situación de las cooperativas tras el desmantelamiento del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES).
Por fuera de esto, las entidades que conforman la Mesa Agroalimentaria respaldaron la intención de licitar el Puerto Quequén. Concretamente, valoraron “la iniciativa de que el Estado garantice un porcentaje de la operatoria del puerto para pequeños y medianos productores en la comercialización de granos”.
Según se informó desde el gobierno bonaerense, el encuentro también sirvió para hablar del impuesto inmobiliario rural. Mientras desde CARBAP denunciaron “aumentos desmedidos e injustificados”, las entidades de la MAA destacaron la política de segmentación “que permitió la baja de la presión tributaria sobre los productores más pequeños”.
A su turno, el ministro de Desarrollo Agrario bonaerense, Javier Rodríguez, celebró “la construcción de las políticas públicas concretas y diferenciadas que alcancen a todos los actores de la ruralidad“. “Creemos en un Estado inteligente que esté acompañando a todos los productores, pero en especial a los pequeños y medianos productores, productores de la agricultura familiar y cooperativistas”, sentenció.
