Allegados a la pareja declararon que ellos estaban en conflicto y que él había amenazado con suicidarse si ella lo dejaba.
Como se recordará, el hecho se registró en un departamento de la planta baja de un edificio ubicado en la calle 2 entre 61 y 62, donde vivía Laura.
Fuentes judiciales y policiales informaron que la mujer había convivido un tiempo con el presunto femicida, que cumplía funciones en la División de Caballería de la policía provincial, y desde hacía un tiempo se habían separado pero él quería retomar la relación.
El crimen fue descubierto por una amiga de Gutiérrez, también sargento de la fuerza, quien al no poder comunicarse con ella alertó al servicio de emergencias 911 y fue a buscarla a su domicilio.
Al llegar, la amiga y otros agentes que acudieron al lugar advirtieron la presencia de sangre por debajo de la puerta de entrada del departamento.
Luego, personal de limpieza del edificio les facilitó el ingreso al inmueble, donde hallaron muerta, tirada en el piso y boca arriba a Gutiérrez, y una pistola calibre 9 milímetros a poca distancia de su cuerpo, junto a algunas vainas servidas.
A simple vista, el médico legista constató que la mujer recibió un balazo en un brazo, otro en el cuello, uno en el tórax y uno en el estómago, dijeron las fuentes.
En tanto, Acevedo se encontraba herido e inconsciente recostado sobre el suelo y con un gran charco de sangre alrededor, añadieron los voceros.
La Policía solicitó auxilio al Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) de inmediato, y fue trasladado por una ambulancia al Hospital San Martín de La Plata.
Allí, los médicos que lo asistieron constataron que el hombre presentaba dos orificios en la cabeza, uno de entrada en la parte frontal del cráneo y otro de salida en el hueso occipital. Fue operado y quedó bajo custodia de consigna.
En la escena del crimen trabajaron peritos de la Policía Científica junto a personal de la comisaría 9ena. y de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de la ciudad.
El fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 16 del Departamento Judicial de La Plata, caratuló el expediente como “femicidio seguido de suicidio en grado de tentativa”.
El funcionario judicial aseguró a la prensa que por el momento no pudo confirmar que haya habido denuncias previas por violencia de género pero que a raíz de la separación él le había dicho que si no retomaban la relación se “iba a quitar la vida”.
“El oficial había pedido el traslado a su ciudad de origen, en Tandil, y se lo habían concedido hacía pocas horas”, afirmó el fiscal, quien aguardaba el resultado de la autopsia que se iba a realizar en la Asesoría Pericial de La Plata.
En tanto, fuentes de la investigación dijeron que Acevedo había participado de los rastrillajes por el femicidio de Gisella Solís Calle, la odontóloga asesinada en febrero de 2019 y enterrada a un costado de la ruta provincial 19, a metros de la bajada de la Autopista La Plata- Buenos Aires en la localidad de Villa Elisa.
Se trató de la séptima mujer policía asesinada en un marco de violencia de género en lo que va del 2019, completaron los voceros.