La Corte Penal Internacional (CPI), con sede en La Haya, Países Bajos, es el principal organismo judicial encargado de procesar a individuos por crímenes de genocidio, crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad. En ese marco es que cobra relevancia el pedido del fiscal Karim Khan, para la emisión de órdenes de arresto contra figuras prominentes del conflicto entre Israel y Gaza.
Entre los señalados este lunes se encuentran el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el líder de Hamas, Yehiya Sinwar, ambos acusados de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad cometidos “en el territorio del Estado de Palestina (Franja de Gaza) desde al menos el 8 de octubre de 2023”, es decir, el día posterior al ataque de Hamas a Israel y fecha del inició de la actual ofensiva israelí en Gaza.
¿QUÉ ES LA CPI Y CUÁL ES SU FUNCIÓN?
La CPI es el único tribunal internacional permanente con el mandato de llevar ante la justicia a aquellos acusados de los crímenes más graves que afectan a la comunidad internacional. Fue establecida por el Estatuto de Roma en 1998 y comenzó a funcionar en 2002. Su objetivo es poner fin a la impunidad de los autores de crímenes internacionales y contribuir a la prevención de futuros crímenes.
EL ESTATUTO DE ROMA QUE NO FIRMÓ ISRAEL
Aunque Israel no es signatario (nunca firmó) del Estatuto de Roma, la CPI puede ejercer su jurisdicción si se considera que los crímenes fueron cometidos en territorios de estados miembros o por nacionales de estados miembros. Esto significa que, a pesar de no ser parte del Estatuto, individuos de países no signatarios pueden ser sujetos a la jurisdicción de la CPI bajo ciertas circunstancias.
LA ORDEN DE ARRESTO Y SUS IMPLICACIONES
Las órdenes de arresto solicitadas por el fiscal Khan no solo tienen implicaciones legales, sino también políticas. Si bien ni Israel ni Estados Unidos son miembros de la CPI, la emisión de órdenes judiciales podría limitar los viajes internacionales de los funcionarios israelíes, ya que podrían ser arrestados en países que sí son signatarios del Estatuto de Roma.
Entre los crímenes de los que responsabiliza a los funcionarios israelíes está el uso del hambre como “método de guerra” contra los civiles y el “asesinato intencionado”.
“Mi Oficina sostiene que las pruebas que hemos recopilado, incluidas entrevistas con sobrevivientes y testigos, material de video, foto y audio autenticado, imágenes satelitales y declaraciones del grupo de presuntos perpetradores, muestran que Israel ha privado intencional y sistemáticamente a la población civil en todas las partes de Gaza de objetos indispensables para la supervivencia humana”, argumenta Khan.
Además, subraya que las solicitudes presentadas a los jueces son “resultado de una investigación independiente e imparcial” de su oficina.
“Guiados por nuestra obligación de investigar pruebas incriminatorias y exculpatorias por igual, mi Oficina ha trabajado meticulosamente para separar afirmaciones de hechos y presentar sobrias conclusiones basadas en pruebas a la Sala de Cuestiones Preliminares”, explicó.
EL CONFLICTO ISRAEL PALESTINA Y LAS VÍCTIMAS
El conflicto entre Israel y Gaza está teniendo un costo humano devastador. Según el Ministerio de Salud de Gaza, desde el inicio de la guerra, al menos 35.562 personas muerieron y 79.652 resultaron heridas. Israel, por su parte, estima que aproximadamente 1.200 personas murieron en un ataque de Hamas el 7 de octubre, incluyendo más de 300 soldados.
Por lo tanto, la solicitud del fiscal de la CPI marca un momento significativo en la búsqueda de justicia internacional. Aunque el camino hacia la rendición de cuentas es complejo, especialmente cuando se trata de figuras políticas de alto nivel, la acción de la CPI envía un mensaje claro: los crímenes de guerra y contra la humanidad no deben quedar impunes, independientemente del estatus político o geográfico de los acusados.