Gimnasia no sólo se llevó una dura derrota del Bosque ante Central. Mirando hacia adelante, para las finales que se le vienen, para el Clásico y para un fin de año en el que tendrá que escaparle sí o sí a la tabla más peligrosa de todas, sufrió dos lesiones muy preocupantes. Ambas, de rodilla. La de Renzo Giampaoli en el gol de Véliz y luego la del pibe Facundo Di Biasi. En ese sentido, el panorama es muy diferente en ambos casos.
El defensor se lesionó al ir a pelear con el delantero de Central la pelota que termina justamente en el primer gol Canalla, a los 2 minutos. Mucha mala fortuna, porque en el esfuerzo hace un mal movimiento. Sin embargo, algo de alivio llegó luego, con el diagnóstico preliminar: en principio, sería un esguince de rodilla, pero no tendría compromisos ligamentarios. Igualmente, hay que esperar los estudios porque a veces en las imágenes sale alguna cuestión inesperada.
Pero en el Test de Lachman, que los médicos realizaron en el momento, en principio no hubo indicios elocuentes de que tuviera los cruzados comprometidos. De todos modos, lo dicho: habrá que aguardar, más allá de que el defensor se fue de la cancha con toda la rodilla vendada y también inmovilizada. Y de mínima, tendrá varios partidos afuera, lo cual también será una baja en defensa.
Lo del pibe De Biasi: panorama muy pesimista
A diferencia de Giampaoli, lo de Di Biasi si ya tuvo un diagnóstico preliminar en la cancha que indica que en principio tiene comprometido el cruzado anterior de la rodilla derecha. De hecho, el pibe se fue llorando de la cancha y también del Bosque, cuando se retiró en muletas y con una férula en la rodilla.
En este caso, también faltan los estudios, pero en el Bosque el panorama era muy pesimista entre quienes estuvieron compartiendo el vestuario con el pibe, que justo ante Central volvía a la titularidad. “Lamentablemente creemos que se rompió”, fue la conclusión que prevaleció tras el partido.

La lesión de Di Biasi fue cuando fue a trabó fuerte para imponerse ante Franco Ibarra y automáticamente cayó, reclamando asistencia. Ahí mismo, los gestos de los médicos fueron elocuentes y todo indica que tendrá para seis meses de recuperación. Un golpe durísimo para un pibe que había sido una de las grandes revelaciones del Lobo en el primer semestre del 2025.

