Eduardo Domínguez confió en él, pensó en su momento y Mauro Méndez no lo defraudó, incluso teniendo que ocupar el lugar de Mauro Boselli. El DT de Estudiantes apostó por su momento, donde se destapó y se le abrió el arco. En esta oportunidad, fue clave para la remontada ante Barcelona de Ecuador por el partido de vuelta en los play-off de la Copa Sudamericana.
El Pincha hizo lo que tenía que hacer: un gol de entrada para igualar la serie y jugar más tranquilo, y así fue como con una pelota que llegó pasada al segundo palo a la salida de un tiro de esquina ejecutado por Benjamín Rollheiser, apareció solo Mauro Méndez, y de primera arrojándose al piso definió al gol para hacer explotar a UNO.
Y sin respiro llegó el segundo para dar vuelta la serie sobre Barcelona a los 20 minutos: centro milimétrico de Leonardo Godoy para Mauro Méndez, que se anotó nuevamente en la red con una gran definición y rompió la noche con un doblete.