Está en modo espera. Sí, Facundo Farías, uno de los refuerzos estrella de Estudiantes en este mercado, se pone a punto para ser convocado por Eduardo Domínguez y tener su debut en el Pincha. Y en ese camino, cuando le toque, podría hacerlo con una camiseta emblemática del club.
Sí, resulta que el atacante (también puede ser volante ofensivo) que viene de jugar con Leo Messi en el Inter de Miami podría ser en este 2025 el dueño de la 11, una número que representa a la Dinastía Verón y, por consiguiente, a la historia de Estudiantes. Y que durante el año pasado nadie utilizó.
De hecho, el último en usarla en el 2023 fue el último heredero, Deian Verón, el hijo del actual presidente de Estudiantes y el nieto del prócer Juan Ramón, antes de que se marchara del club. Desde entonces, quedó vacante, porque está claro que portarla tiene un peso especial y que no es para cualquiera.

Que le toque a Farías, que es una de las figuras que el Pincha contrató en este mercado de la mano de Foster Gillett, no parece casual. Hasta ahora, de los refuerzos top que llegaron en este mercado, ninguno optó por esa camiseta. Lucas Alario pudo ser uno, pero eligió la 27. Y Medina, la otra incorporación estrella, se inclinó por la 25.
Los extraños casos que utilizaron la 11 made in Verón
Luego del retiro de la Bruja y después de su vuelta en el 2017, hubo cuatro jugadores que lucieron ese emblemática camiseta. En la Sudamericana de 2014 ese dorsal lo utilizó Gabriel Seijas, en la edición del 2016 le tocó a Leonardo Areal y en la de 2017 a Matías Ahumada Acuña. Ninguno de los tres llegó siquiera a ir al banco. Luego, llegó el turno de Matías Rosso en la Libertadores de 2015, que la lució en dos ocasiones y el último fue Iván Erquiaga, en la de 2018, con algunos minutos en cancha.


