El 4 de septiembre de 1934 en Las Palmas, Córdoba, nacía Carlos Timoteo Griguol, quien décadas más tarde se convertiría en un verdadero emblema de Gimnasia. Hoy el Viejo, quien pasó a la eternidad en mayo de 2021, cumpliría 91 años y por eso lo recordamos.
Si bien nunca dirigió al club en el día de su cumpleaños, en 1996 vivió una situación particular: el equipo tripero jugó entre semana en la noche del día previo, recibiendo en el Bosque a otro de los amores que cosechó Timoteo en el fútbol como lo fue Ferro Carril Oeste.
Aquel martes 3 a las 21 horas se enfrentaron el Lobo y el Verde, en un partido cerrado que se terminó definiendo por la mínima diferencia y vio al plantel festejar en los vestuarios sus primeros tres puntos del Torneo Apertura, ya prácticamente en horas de madrugada.
Así Griguol inició su cumpleaños con un festejo que tuvo seguramente algún tinte agridulce, luego de la gran historia que supo construir en los ’80 con el equipo de Caballito, con el cual conquistó dos títulos como DT: el Nacional 1982 y el Metropolitano 1984.
El partido culminó 1-0 para Gimnasia, que marcó su único gol a los 38 de la primera parte, luego de una buena combinación entre los mellizos Gustavo y Guillermo Barros Schelotto. El gol fue mitad de Guillermo y mitad del arquero Oscar Ferro, de floja respuesta.
Un triunfo triplemente especial para Griguol
Además de ser un triunfo con un valor extra por ser en la víspera de su cumpleaños y por tener al Verde como rival, tuvo un tercer condimento especial. ¿De qué se trató? Fue el primero para el Lobo luego de haber perdido el Clausura a manos de Vélez semanas atrás.
Ya le había sucedido algo similar en 1995
Curiosamente un año antes le había pasado algo parecido: también el 3 de septiembre y también frente a Ferro, se había impuesto por 1-0. En esa oportunidad había sido en Caballito gracias a un agónico gol de Pablo Morant, pero no por la noche sino un domingo por la tarde.