La edición 189 del Clásico Platense no tuvo dueño. Gimnasia y Estudiantes empataron 1-1 en el Bosque y no se sacaron diferencias, a pesar de tener distintas maneras de plantear el partido. El Pincha fue el que más tuvo la pelota y el que más empujó, generando varias situaciones que el propio DT lamentó.
Finalizado el encuentro, Eduardo Domínguez habló en conferencia de prensa y analizó el encuentro: “Sabíamos que Gimnasia se hacía fuerte en la pelota larga, por lo que tomamos precaución. Creo que se hizo un partido muy friccionado”, comenzó.
Respecto a la producción de su equipo, señaló: “Tuvimos muchísimas situaciones de gol, no estuvimos certeros. Queríamos llevarnos más”, aseguró, y luego agregó: “El equipo tuvo fluidez, situaciones por dentro, por fuera. Hizo méritos para llevarse los tres puntos. Me da tranquilidad la búsqueda”, remarcó el Barba.

Estudiantes, del primer al segundo tiempo
El Pincha se fue al descanso en desventaja y Domínguez se vio obligado a hacer dos modificaciones en el entretiempo, rompiendo así la línea de cinco defensores. Aún así, el DT indicó: “El sistema fue el mismo en el primer y segundo tiempo. Con el ingreso de Edwuin, pusimos a Arzamendia de central”, sostuvo.
“El segundo fue un dominio total de Estudiantes”, añadió luego. “Y si es justo o no el empate, tuvimos muchas situaciones y no fuimos certeros. Estudiantes hizo una buena presentación pero no pudimos ser certeros”, insistió el DT.
Finalmente, de cara a lo que viene, concluyó: “Buscamos variantes y situaciones para recrear el mejor contexto de solidez, por lo que vamos a seguir buscando. Tenemos tranquilidad y paciencia. Tenemos que seguir buscando y generando el contexto para que el jugador esté lo más cómodo posible”.
El gran desahogo de Domínguez en el final
Más allá de cualquier análisis o conclusión, Estudiantes, por no bajar los brazos e insistir, tuvo premio sobre el final. Domínguez, que no atraviesa su mejor presente en el club, que no termina por encontrar la mejor versión de su equipo y que lleva cinco partidos sin ganar por el torneo local, se desahogo con el gol de Giménez y lo gritó con los puños apretados.

