Con una fecha por delante, el Bologna de Benja Domínguez está cerrando un ciclo futbolístico de ensueño. Porque el equipo de Vincenzo Italiano se consagró campeón de la Copa Italia y -a falta de un partido- podría cerrar el Calcio en el top 6. Una temporada que está alineada con el primer año del ex Gimnasia en Italia.
Pasado el encuentro ante Fiorentina (derrota 2-3 en Florencia), Benja lleva disputados 28 partidos en su año de bautismo en el fútbol europeo, en el que marcó cuatro goles y dio tres asistencias. Contribuyendo en un grito de su equipo cada 201 minutos en cancha. Superlativo por tratarse de un rookie.
Con versatilidad táctica, Italiano ha podido explotar a Domínguez en distintas posiciones. Si bien como extremo izquierdo -su posición natural- es donde más veces lo ha usado (18 encuentros), el joven de 21 años también se supo mover por derecha en otros cuatro partidos.
Un aporte Mayor
Tal es el nivel que ha mostrado Benjamín a lo largo de esta primera etapa en Bologna que Lionel Scaloni tomó la decisión de tenerlo en cuenta para la doble fecha de Eliminatorias que se disputó en el mes de marzo, frente a Uruguay en Montevideo y Brasil en el Monumental.
Tanto es así que Scaloni priorizó a Domínguez por encima de otro talento consolidado en Europa -Alejandro Garnacho- y lo hizo público en rueda de prensa. No sin elogiar al ex GELP.
“Vimos el presente, es un chico que está bien, que puede jugar de extremo por derecha o por izquierda, se saca de muy fácil un hombre de encima, nos puede aportar algo que el equipo no tenía. Entre él y Garnacho, decidimos por él para verlo y conocerlo”, supo decir Scaloni en relación a Benja, quien arrancó como suplente en Florencia.
Domínguez llegó a Bologna en agosto de 2024 a cambio de 4,5 millones de euros -más un bonus de 1,5 millón por objetivos- dejándole una plusvalía del 15% a Gimnasia ante una futura transferencia. Con contrato hasta junio de 2029, Benja va creciendo. Y con un futuro prometedor.