La provincia de Buenos Aires se destaca por sus paisajes, su cultura y su rica historia, convirtiéndose en un destino ideal para recorrer y descubrir. En ese marco, muchas de sus ciudades cuentan con algunas de las obras más desafiantes de Francisco Salamone, el arquitecto e ingeniero ítalo-argentino reconocido por su estilo monumental y único.
En este sentido, la Subsecretaría de Turismo bonaerense recomienda conocer desde estos edificios que fueron inaugurados entre 1936 y 1940 y se ubican en ciudades como Azul, Alberti, Leandro N. Alem y Adolfo Gonzales Chávez. Se tratan de “creaciones singulares, con gran valor cultural para las comunidades se convirtieron en íconos de los destinos turísticos bonaerenses”.
Cabe señalar que, el trabajo de Francisco Salamone fue declarado patrimonio cultural de la provincia de Buenos Aires en el año 2001. “La obra sigue siendo vanguardia por su osadía, monumentalidad y creatividad. En la actualidad sus creaciones son visitadas por turistas de todo el planeta”, señalaron desde la Subsecretaría de Turismo provincial.
Las obras desafiantes de Francisco Salamone en la provincia de Buenos Aires:
Palacios Municipales con míticas torres de reloj:
Entre las obras más destacadas de Salamone situadas en el noroeste de la provincia de Buenos Aires, se encuentra Municipalidad de Alberti, la cual posee una torre de reloj, detalles simples y geométricos. Se trata de uno de los edificios tradicionales realizados por el arquitecto.
Por su parte, el de Vedia, en el distrito de Leandro N. Alem, cuenta con una increíble torre de reloj que resalta del bloque principal con motivos horizontales, mientras que el de Rauch está compuesto por relieves geométricos que desembocan en la imponente torre de reloj. El partido cuenta con dos pequeñas y pintorescas delegaciones municipales de estilo neocolonial que datan del año 1938.
El edificio municipal de Adolfo Gonzales Chávez fue inaugurado en 1939. Consiste en una estructura de volúmenes puros y líneas horizontales que va hacia el cielo con la clásica torre de reloj. A pocos metros del municipio, en el ex Mercado Municipal obra de Salamone funciona el Centro Cultural Georgina Valdéz de Lafargue, con muestras artísticas y educativas.
Azul, un matadero sombrío y el cementerio del Ángel de la Muerte
Otra celebre obra del arquitecto es el Cementerio de Azul, inaugurado en 1938. Su imponente fachada está coronada con las siglas R.I.P acompañadas de figuras ornamentales que representan el fuego eterno. En el acceso, se ubica una escultura del Ángel de la Muerte con una espada entre sus manos genera a simple vista un escenario impactante.
En esta misma ciudad, se encuentra el matadero, que fue construido en el mismo año. De manera simétrica, diferencia las diversas áreas de trabajo. Lo más impactante es su torre en forma de cuchilla que, en el marco del paisaje, le da un aspecto sombrío.
Los mataderos en Azul son de pequeñas dimensiones y se caracterizan por tener plantas cuadradas. En el de Chacharí, se puede leer la palabra “matadero”. De fácil y rápido recorrido para deslumbrarse con otra interesante obra del arquitecto.
Admirar la belleza de las plazas salamónicas:
El legado de Salamone no solo se puede apreciar en edificios, sino que realizó maravillosas plazas para ser disfrutadas por el pueblo bonaerense. Una de ellas es la plaza General José Arias, situada frente a la dependencia municipal de Alberti. La misma cuenta con un imponente mástil decorado con formas circulares y luminarias esféricas. Un forma parecida tiene la plaza Rivadavia, frente al Palacio Municipal de Alem.
En Azul, la plaza San Martín rodeada por edificios icónicos como la catedral y el municipio, se destaca por baldosas con diagramas zigzagueantes en colores blanco y negro que generan un gran impacto visual.



