El 7 de agosto pasado, la compañía de entretenimiento estadounidense Marvel Comics introdujo a su primer personaje argentino en la legendaria saga de los X-Men, un mutante llamado Valentín Correa, alias Ramson. Este personaje generó una ola de reacciones en Argentina, especialmente entre los seguidores del presidente libertario Javier Milei, quienes mostraron su descontento por la representación étnica del personaje.
LIBERTARIOS DICEN: “MUY MARRÓN”
En particular, la controversia gira en torno al color de piel de Ramson, que algunos consideran “demasiado oscuro” para representar a un argentino, una percepción que desata un debate más amplio sobre la identidad y la diversidad en nuestro país.
Valentín Correa, mejor conocido como Ramson, es descrito en la bio no oficial de Marvel Database como un joven que, tras ser secuestrado y abandonado por sus padres, descubre que las balas de sus captores no solo no lo dañan, sino que lo hacen más fuerte.
Eventualmente, logra escapar y se encuentra viviendo solo, hasta que, en circunstancias desconocidas, llega a Estados Unidos y se une a los X-Men tras ser perseguido por una criatura monstruosa. Su principal habilidad como mutante es un corazón de agujero negro, que lo hace inmune a diversos ataques y lo convierte en un adversario formidable.
La creación de Ramson, sin embargo, no pasó desapercibida en la Argentina. La comunidad libertaria, conocida por su defensa de una visión eurocéntrica de la identidad nacional, criticó fuertemente el diseño del personaje, centrándose principalmente en su color de piel.
SEGUIDORES DE MILEI OFENDIDOS
En redes sociales, algunos seguidores de Javier Milei, como el troll “Pregonero”, se refirieron al personaje con términos despectivos, como “marronazo”, utilizando un eufemismo para evitar el uso de la palabra “negro”, que en Estados Unidos tiene connotaciones racistas más marcadas que en Argentina.
Este tipo de reacción deja entrever un rechazo a cualquier representación de la argentinidad que no encaje dentro de los cánones europeos, ignorando la rica diversidad étnica y cultural que caracteriza al país.
La Argentina se ha dicho históricamente que constituye un crisol de razas y culturas, con una población que mezcla orígenes europeos, indígenas y más sesgadamente, afrodescendientes.
Sin embargo, la narrativa eurocéntrica sigue teniendo una fuerte presencia en ciertos sectores de la sociedad, que prefieren imaginar a la Argentina como una extensión de Europa en América Latina, obviando la realidad de que muchos argentinos no se ajustan a esos estándares.
Este es el contexto en el que surge la controversia libertaria en torno a Ramson: un personaje que, por su diseño, desafía las nociones preconcebidas de algunos sobre lo que significa el “ser argentino”.
La reacción libertaria frente a Ramson es el emergente de un problema más profundo en la sociedad argentina: la dificultad de aceptar y celebrar la diversidad.
Ese sector ve en Valentín Correa una amenaza a la imagen de una Argentina exclusivamente blanca y europea. Esta resistencia a reconocer la diversidad del país es un rasgo de intolerancia que por estos días parece estar ganando la “batalla cultural” en redes sociales.
El debut de Ramson en los cómics de X-Men marca un momento significativo en la representación de personajes latinoamericanos en la cultura popular global.