Michelle Jenner, Roberto Enríquez y Hugo Silva protagonizan “La cocinera de Castamar”, una serie de época basada en la novela de Fernando J. Múñez, que narra la historia de Clara Belmonte y Diego, el Duque de Castamar, ambos con un pasado doloroso, pero a quienes les cambiará la vida al conocerse. Tendrán que luchar contra uno de los grandes obstáculos de la época si quieren estar juntos: la diferencia de clases, además de hacer frente a la sed de venganza de Enrique de Arcona.
La historia está situada en Madrid, en el Siglo XVIII y uno de los personajes que aparece en los episodios es el del rey, ¿pero de qué rey estamos hablando? ¿existió en la vida real?
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¿Quién es el rey de La cocinera de Castamar?
El rey que aparece en la serie es Felipe V, y sí, existió en la vida real: fue rey de España desde el 16 de noviembre de 1700 hasta su muerte en 1746, con una breve interrupción (comprendida entre el 16 de enero y el 5 de septiembre de 1724) por causa de la abdicación a favor de su hijo Luis I, fallecido prematuramente el 31 de agosto de 1724.
Lo llamaban «el Animoso» y nació en Versalles, Francia, el 19 de diciembre de 1683. Como bisnieto de Felipe IV, fue el sucesor del último monarca de la Casa de Austria, su tío-abuelo Carlos II, por lo que se convirtió en el primer rey de la Casa de Borbón en España. Su reinado de 45 años y 3 días (partido, como ya se ha señalado, en dos periodos separados) es el más prolongado en la historia de la monarquía española.
Si bien Felipe V tenía un poder absoluto, nunca gobernó como tal. La enfermedad que padecía desde la adolescencia y que provocaba en el rey ataques transitorios de depresión impidió que pudiera cumplir regularmente con sus tareas de gobierno. Por ello, el verdadero poder lo ejercieron sus primeros ministros, algunos cortesanos como la princesa de los Ursinos, y posteriormente su segunda mujer, Isabel Farnesio, con la que se había casado en 1714.
La Farnesio era una mujer temperamental, autoritaria y de una desmesurada ambición personal. Según las crónicas de la época, no era excesivamente guapa, tenía la cara marcada con cicatrices por la viruela y comía mucho a todas horas. Además, aprovechó los largos periodos depresivos de su esposo para ganar su propio poder. Apartó a su marido todo lo que pudo del trono y mostró siempre absoluto asco hacia los hijos de Felipe V con su primera esposa, María Luis Gabriela de Saboya. Ella y el Rey tuvieron varios hijos, entre ellos Carlos (futuro Carlos III).
Durante los últimos años de su reinado, la enfermedad mental y el deterioro físico de Felipe V se fueron acentuando, se puede apreciar al rey en obras célebres de los pintores franceses, como Jean Ranc y Van Loo, se observa el cansancio que presenta, producto de problemas alimenticios y males psicológicos, hasta que en la noche del 9 de julio de 1746 murió de un ataque cerebrovascular.
¿Qué rol cumple Felipe V en la serie?
En “La cocinera de Castamar”, el Rey le ofrece un trabajo a don Diego de Secretario del Consejo. Desconfía de todo el mundo, padece paranoia y melancolía. El actor que interpreta a Felipe V es Joan Carreras, mientras que Silvia Abascal da vida a Isabel de Farnesio, la segunda esposa de Felipe V.
En un momento a solas, el rey Felipe V le entrega a la cocinera un secreto que debe guardar. Cuando la Reina se presenta con Diego no la reconoce y se altera dando una imagen totalmente irreconocible: “¡Maldigo la Corona!”, reclama en un estado de locura.
Horas antes, durante la celebración en Castamar, la Reina se da cuenta de que el Rey ha desaparecido y su grito hace estallar la preocupación entre los presentes en palacio.
En la serie, el rey Felipe V protagoniza episodios donde se trastorna y pierde la razón. Y sí, el auténtico Felipe V era así. Todos los cronistas de la época hablan de periodos de depresión aguda, de “inercia total”, de “profunda melancolía”. Su enfermedad llegó a tal nivel que temía que lo iban a envenenar con una camisa repleta de veneno y se empeñó en llevar sólo camisas que antes hubiesen sido usadas por la Reina.
En su libro La vida y la época de Fernando VI (Planeta, 1998), el historiador Pedro Voltes afirma que Felipe V “andaba desnudo ante extraños; se pasaba días enteros en la cama en medio de la mayor suciedad, hacía muecas y se mordía a sí mismo, cantaba y gritaba desaforadamente, alguna vez pegó a la reina, con la cual se peleaba a voces y repitió tanto sus intentos de escaparse que fue preciso poner guardias en su puerta para evitarlo”.
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