Hoy, 17 de mayo, se conmemora el Día Internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia, fecha que tiene como fin denunciar los actos discriminatorios que sufren las personas integrantes del colectivo LGBTIQ+ por orientación sexual. De acuerdo a un informe de la Federación Argentina LGBT, en los últimos años, Argentina ha registrado un aumento de los crímenes de odio.
Desde 2005, gracias a la iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), se celebra esta efeméride con el objetivo de generar conciencia sobre la discriminación basada en la orientación sexual e identidad de género. La elección de la fecha se debe a que el 17 de mayo de 1990, la Asamblea Mundial de la Salud de la Organización Mundial de la Salud eliminó la homosexualidad de la lista de Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE). De esta manera, la homosexualidad dejó ser considerada una enfermedad mental.
Actualmente, más de un tercio de los países del mundo penaliza las relaciones entre personas del mismo sexo y tan solo 24 reconocen el matrimonio entre personas del mismo sexo. A su vez, solo 9 países del continente (Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador, Uruguay y algunos Estados de México) disponen de una ley, normativa o disposición judicial sobre el derecho a la identidad autopercibida.
Día Internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia: crecen los crímenes de odio en Argentina
A pesar del importante avance en derechos para las personas LGBTIQ+, como la Ley de Identidad de Género, Ley de Cupo Laboral Trans y el registro no binario en el documento de identidad, los crímenes de odio basados en la orientación sexual crecen año a año en Argentina.
El Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) junto con el investigador Martín De Grazia, define a los crímenes de odio como el “conjunto de delitos que se cometen en contra de determinadas personas, debido a su pertenencia real o supuesta a un cierto grupo sobre la base de la etnicidad, la religión, la orientación sexual, la identidad y expresión de género y características sexuales, la nacionalidad, las ideas políticas, la edad, la discapacidad, la condición socioeconómica, el color de piel, etc”.
En este sentido, el Informe Anual del Observatorio Nacional de Crímenes de Odio LGBT+ elaborado por la Federación Argentina LGBT denuncia que en 2023 se perpetraron en la Argentina 133 crímenes de odio, en los que la orientación sexual, la identidad y/o la expresión de género de todas las víctimas han sido utilizadas como pretexto discriminatorio para la violación de sus derechos. Asimismo, se ha registrado un crecimiento preocupante de los casos, ya que en 2021 hubo 120 crímenes y en 2022, 129.
Cabe aclarar que, estos datos no son exactos, ya que el informe solo incluye a aquellos casos difundidos por los medios de comunicación o que fueron ingresados como denuncias en la Defensoría LGBT, ante las organizaciones de la FALGBT+ o documentados por el Centro de Documentación y Situación Trans de América Latina y el Caribe.
“La falta de leyes y políticas públicas para la protección y promoción de los derechos de la población LGBTI, sumado al auge de los discursos de odio y discriminación en entornos digitales y medios tradicionales, han resultado en un aumento de los crímenes de odio por identidad de género y orientación sexual. También se han registrado retrocesos en las normas y en las políticas públicas que afectan a la población LGBT de la región”, aseguran desde el MERCOSUR.