El próximo sábado 19 de octubre se conmemora el Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Mama, una fecha que tiene como objetivo promover el diagnóstico precoz de esta enfermedad. Además de las mamografías y chequeos con profesionales, el autoexamen es necesario para la detección temprana.
El cáncer de mama es uno de los tipos de tumor maligno más frecuente en las mujeres que si no es tratado de manera temprana, puede avanzar hacia otras regiones del cuerpo. Afecta a 1 de cada 8 mujeres que hayan alcanzado los 80 años, según la Sociedad Argentina de Mastología (SAM).
Si no es tratado de manera temprana, el cáncer de mama puede avanzar hacia otras regiones del cuerpo y por eso es importante realizar una mamografía anual a partir de los 40 años en las mujeres sin antecedentes familiares. Además, los profesionales recomiendan hacer un autoexamen mamario regular para advertir anomalías en las mamas y recurrir a una consulta médica.
¿Qué es el autoexamen mamario y para qué sirve?
El autoexamen mamario es una práctica de autoinspección que pueden realizar las mujeres para conocer el estado de sus mamas. Debe realizarse una vez al mes y, según explican los especialistas, especialmente de siete a diez días después de menstruar. En el caso de las mujeres que no menstrúan, se recomienda elegir un día fijo del mes para incorporarlo a la rutina.
En caso de que la paciente detecte algún signo de alarma en las mamas, la consulta con el mastólogo debe hacerse de manera inmediata, independientemente de la edad y de la fecha de su último control.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que “no es una herramienta de diagnóstico precoz dado que cuando un nódulo es palpable suele tener al menos 1 cm de diámetro, es decir que la enfermedad no se encuentra en sus estadios iniciales”, tal como informa la SAM en su sitio oficial.
Cómo hacer un autoexamen mamario: paso a paso
Para realizar un autoexamen de mamas es importante estar en un ambiente bien iluminado y colocarse frenre a un espejo con el torso desnudo. Luego, debes seguir los siguientes pasos:
- Relajar los blazos y dejarlos caídos al lado del cuerpo para observar el aspecto externo de los senos. Ver si son simétricos, el tamaño que tienen y verifica que la piel no tenga hoyuelos, esté rugosa o enrojecida.
- Repetir el mismo proceso pero esta vez con las manos apoyadas sobre la cadera y contrayendo los músculos del pecho.
- Volver a observar las mamas, ahora entrelazando las manos por detrás del cuello y girando ligeramente el busto de izquierda a derecha.
- Ahora hay que comenzar a palpar los pechos. Primero llevá el brazo del lado del seno a examinar detrás de la cabeza y, con la otra mano, palpá de afuera hacia adentro. Debés inspeccionar de manera horizontal desde el tórax y las costillas hacia el pezón y la zona que lo rodea.
- Repetí el procedimiento con el brazo al costado del cuerpo.
- Palpá la axila completa con el brazo detrás de la cabeza para detectar posibles nódulos o bultos.
- Apretá suavemente el pezón con el dedo índice y el pulgar y observá si se produce alguna secreción de líquidos y tomá nota de sus características.
- Repetí este proceso de palpado con la otra mama.
Cuáles son los signos de alarma tras un autoexamen mamario
En el autoexamen se puede encontrar diversos signos que pueden alertar algún problema de salud como:
- Bulto o engrosamiento en la mama.
- Aumento en los ganglios linfáticos cerca de la axila.
- Cambios físicos en la mama como puede ser el color, tamaño, textura o forma.
- Enrojecimiento de la piel, especialmente cerca del pezón.
- Formación de arrugas en la piel, en la zona de la mama.
- Secreciones por el pezón.
- Descamación o desprendimiento de la piel del seno.
- Dolores o molestias en el seno.
- Pérdida de peso.
- Bultos en la axila.
En cualquiera de estos casos es urgente acercarse a un profesional de la salud para realizar los estudio correspondientes y que puedas brindar un diagnóstico certero. Conocé cómo prevenir la enfermedad en esta nota.