La negociación entre el sindicato de choferes de colectivos (UTA) y las cámaras empresarias de las líneas que prestan el servicio de transporte público en el AMBA continúa hoy. El conflicto parece no tener solución si el Gobierno Nacional no actualiza los subsidios. ¿Qué puede pasar?
El vicepresidente de la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), Luciano Fusaro, confirmó que, hasta anoche, no tenían novedades. Los titulares de las empresas de colectivos pretenden reunirse esta mañana (antes de la audiencia con la UTA) con autoridades nacionales de la Secretaría de Transporte de la Nación.
“Esperamos durante la mañana de mañana (por hoy) tener algún tipo de reunión para hacer un último intento y ver con qué recursos contamos“, expresó. La idea es obtener precisiones sobre los próximos aumentos del boleto, pero también actualizar los subsidios que reciben de parte del Estado nacional.
“Sin una previsión de ingresos para las próximas semanas no hay manera de ofrecerle algo al gremio”, avisó Fusaro. Si se da este escenario, las empresas tendrán “que pedir más tiempo”, pero la última palabra la tendrá la UTA que conduce Roberto Fernández. La audiencia con el gremio está prevista para las 13.00 por lo que los resultados se darán a conocer a la tarde.
Reclamos colectivos
Al día de hoy, el servicio de transporte público de pasajeros está trabado en un embotellamiento.
Por un lado, el sindicato de choferes reclama una diferencia de 250.000 pesos reconocida y homologada en la última paritaria.
Mientras tanto, las empresas de colectivos le piden al Gobierno Nacional que se ponga al día con los subsidios para poder hacerle frente a sus gastos.
Finalmente, el Estado que intercede de distintas maneras. En principio, no accede a revisar el cálculo de las compensaciones tarifarias dejando que se licúen los fondos que reparte entre las empresas. Paralelamente, suspendió el aumento de boleto bimestral que se había planificado originalmente lo que también ahoga a las compañías.
“Teníamos un aumento en abril que no se dio, el de mayo es un ni porque tampoco te dicen que no definitivamente. Es muy incierto el panorama. Junio tampoco sabemos qué va a pasar“, contó Fusaro.
El cambio reglamentario
En este panorama, el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, emitió la Resolución 212/24 con la que puso en marcha algunos cambios reglamentarios que dejan contra las cuerdas a las empresas de los colectivos porque impone mayores requisitos para quienes quieran acceder a las compensaciones tarifarias y al precio preferencial del combustible.
Por ejemplo, la regulación original (del año 2003) establecía que las compañías podían contar con el beneficio del precio diferencial del gasoil si tenían los seguros y la VTV actualizada. Ahora, Caputo le sumó que deben cumplir con el convenio colectivo de trabajo (justo lo que las empresas están diciendo que no pueden hacer).
Asimismo, la extensa norma estableció un sistema de multas y sanciones para cuando “se produzca la suspensión o interrupción de los servicios”. A partir de ahora, el Estado va a deducir el equivalente a un treintavo (1/30) de los montos de las compensaciones que le corresponde a la empresa sancionada por cada día de suspensión o interrupción del servicio.