Las universidades nacionales se preparan para realizar la segunda marcha federal. Será mañana y si bien tendrá réplicas en todo el país se espera una masiva movilización en la Ciudad de Buenos Aires. La ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, intentó desestimar el reclamo que pone en jaque al gobierno libertario.
La respuesta fue a través de un comunicado oficial difundido por su cartera. Ahí, la funcionaria sostuvo que el conflicto “responde más a intereses políticos que a las necesidades del sistema educativo”. A pesar de lo que dicen tanto los rectores como los gremios, Pettovello aseguró que “los reclamos educativos están todos atendidos y resueltos”.
La intención del Gobierno Nacional es deslegitimar las demandas de la comunidad educativa argumentando que no tienen que ver con cuestiones académicas. En este sentido, el comunicado de Capital Humano indicó que “el Gobierno está al día y paga para que los profesores estén en las aulas dando clases”.
Según Capital Humano, el único problema con las universidades es que “se exigió claridad en la gestión de los recursos“. En el comunicado de este martes denunciaron que “los fondos han sido desviados hacia gastos no prioritarios en lugar de destinarse a la mejora de la calidad educativa”.
La UBA, el principal blanco de críticas
Puntualmente, mencionaron a la Universidad de Buenos Aires (UBA), la casa de estudios más importantes del país y que lidera los reclamos. La administración libertaria advirtió que sus autoridades “no han rendido cuentas de manera adecuada” porque “el 89 por ciento de los fondos transferidos entre 2015 y 2022 aún no han sido rendidos“.
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A esto le sumaron el “costo de estudiantes extranjeros” y supuestas “irregularidades académicas” y “equidad en el sistema educativo“. Sobre este último concepto explicaron que “el 61,2 por ciento de los estudiantes de la UBA provienen de familias con educación superior completa, financiando así la educación de sectores privilegiados con recursos destinados a los más vulnerables“.
Cuenta regresiva para el veto
Lo cierto es que rectores, sindicatos y estudiantes parecen coincidir en que mañana deben reclamarle más fondos al Gobierno Nacional. Por eso se preparan para una gran marcha, la segunda del año, en la que pedirán que Javier Milei promulgue la ley de financiamiento universitario.
El presidente de la Nación ya prometió, en reiteradas oportunidades, que vetará la norma que aumenta las partidas presupuestarias para las universidades. Sin embargo, hasta ahora no lo ha hecho y el míercoles, día después de la movilización, vencen los plazos legales para hacerlo. Justamente, se especula con que el veto salga ese día para no generar aún más adhesión a la marcha universitaria.
