El martes por la noche, mientras los demás canales debatían temas más o menos trascendentes, se emitió en la pantalla de LN+ una joyita televisiva que no tiene nada que envidiarle a los mejores capítulos de Casados con Hijos. En el programa de Esteban Trebucq —alias el Pelado, militante entusiasta del “siempre a favor del cambio, aunque no sepamos a dónde vamos”— un grupo de estudiantes libertarios universitarios se animó a contar su drama existencial: ser de derecha (o ultraderecha, pongámosle sin anestesia) en universidades públicas.
Uno de los muchachos relató entre ceja fruncida y gesto de incomprendido que tuvo que cambiarse de la Universidad Nacional de Luján a la Universidad Nacional de General Sarmiento porque, atención, no lo dejaban militar.
La razón, según explicó, es que en esas instituciones predomina “la izquierda”, “el kirchnerismo” y otros males incurables como la lectura de autores que usaban la palabra “solidaridad” sin ironías. Y él, pobre víctima del estatismo progresista, se sintió marginado por querer repartir panfletos con frases de Milei y memes de Elon Musk. O algo así.
¿Y KICILLOF QUÉ TENÍA QUE VER?
Hasta acá, uno pensaría: “Bueno, un testimonio más de alguien que se siente excluido ideológicamente”. Pero la parte gloriosa llegó cuando el joven se lanzó de lleno al barro conspirativo y disparó: “Esto es culpa de Axel Kicillof, que no nos deja militar por ser libertarios”. ¡Pum! Plot twist.
Ahí mismo, el Pelado Trebucq —que suele estar más alineado con el gobierno libertario que la corbata de Adorni con el ego de Milei— parpadeó un par de veces, se tomó dos segundos y, con un dejo de decencia intelectual (oximoron?) que dejó a todos descolocados, tuvo que aclararle:
“Pero las universidades nacionales no dependen del gobierno de la Provincia“, eh. O sea… no es Kicillof el que las maneja”.
Silencio. Silencio de esos incómodos que ni en Gran Hermano saben cómo rellenar. El joven libertario quedó con la boca abierta, en shock, dio la impresión de querer responder algo, pero el procesador de Windows 95 con el que parece pensar entró en “pantalla azul” y no hubo recuperación posible.
LIBERTARIOS QUE SON UN CHISTE
La escena fue una mezcla de sketch de Cha Cha Cha, capítulo de La Niñera y debate estudiantil en el foro de Taringa. Lo tragicómico del asunto es que este muchacho se preparó para ir a la tele a denunciar una opresión invisible, pero se olvidó de googlear cómo funciona el sistema universitario argentino. Un detalle menor.
La universidad pública, como todos saben (bueno, casi todos), tiene autogobierno y depende económicamente del gobierno nacional. Y si alguien quisiera que los libertarios tengan más lugar en las aulas, quizás debería empezar por… no gobernar con motosierra y odio hacia lo estatal.
Pero claro, lo importante no era entender cómo funciona el país. Lo importante era victimizarse, gritar “¡Kicillof me censura!” y esperar que nadie del propio canal tenga el mal gusto de aclarar la verdad.
Spoiler: alguien lo hizo. Y fue glorioso. Un millón más como estas y Trebucq quedará reivindicado.