La Legislatura vivirá una tarde-noche decisiva, dado que a las19, la Comisión de Presupuesto e Impuestos de la Cámara de Diputados —presidida por Juan Pablo de Jesús (Unión por la Patria)— volverá a reunirse para intentar destrabar el endeudamiento solicitado por el gobernador Axel Kicillof, un punto que quedó pendiente la semana pasada y que aún no cuenta con dictamen para ser tratado mañana en el recinto ya que se necesitan los dos tercios de los votos para aprobar el empréstito.
Un dato no menor es lo que fuentes legislativas aseguraron a INFOCIELO: La estrategia legislativa ha variado respecto al año pasado. Si bien con mayoría simple en Comisión se habilita el despacho para financiamiento (endeudamiento), este año se optó por darle despacho de comisión a los proyectos que, una vez que se traten en el recinto, se tenga la certeza de que van a aprobarse. Es por eso, entre otras cosas, que el martes pasado no hubo despacho de comisión de sobre este tema dado que nadie asegura los dos tercios favorables en el recinto, pero sí de los otros dos proyectos: Presupuesto e Impositiva, que requieren mayoría simple, por eso tuvieron dictamen.
Esta misma fuente recordó, con buen tino, que el año pasado todo el paquete tuvo despacho favorable de comisión sin tener asegurados los votos necesarios. Todas las leyes naufragaron. Hoy, la traba principal está en el fondo para intendentes. El mismo figura como atado al endeudamiento (8% del total de toma de deuda y para obras), los jefes comunales, la oposición y parte del peronismo entienden que debe ser un fondo fijo y de libre disponibilidad.
Esto último podría ser otorgado por el Ejecutivo, que, asegura, en el único pedido que no cederá es en los cargos de la Suprema Corte.
QUÉ PIDE KICILLOF
El Ejecutivo provincial reclama la aprobación de dos tramos de crédito: uno por U$S 1.045 millones y otro por U$S 1.990 millones, este último objeto de reclamo de los intendentes, que exigen que el 8% se traduzca en un fondo de transferencia directa para los municipios. Sin avances concretos, la discusión se recalentará en una tarde que promete ser determinante.
La semana pasada, el oficialismo consiguió dictamen para el Presupuesto 2026 y la Ley Impositiva, aunque sólo con mayoría propia. El PRO, la UCR y la Coalición Cívica presentaron despachos en minoría y solicitaron postergar el debate por el financiamiento para ganar tiempo y acercar posiciones de cara a la sesión prevista para mañana.
Ambas cámaras —Diputados y Senado— sesionarán en espejo este miércoles 26 de noviembre. El objetivo es claro: aprobar en tándem el Presupuesto, la Ley Fiscal y el endeudamiento. Sin embargo, si el acuerdo no llega en las próximas horas, al oficialismo tendrá 6 días para intentar aprobar el paquete antes del recambio legislativo del 10 de diciembre, un escenario mucho más incierto por la cantidad de diputados y senadores que ingresan de La Libertad avanza y el PRO, ambos bloques sin posibilidad de negociación de apoyo a Kicillof.
NEGOCIACIONES (ALGO) ESTANCADAS
En la previa, la Legislatura se mueve en clima de ebullición. La discusión por el financiamiento expondrá nuevamente la distancia entre Unión por la Patria y la oposición más dura, que asegura que el diálogo es prácticamente inexistente y que no hay garantías de que se llegue a la sesión con un entendimiento claro.
Desde el oficialismo, los operadores designados —el ministro de Infraestructura Gabriel Katopodis y el diputado electo Mariano Cascallares, junto con Facundo Tignanelli, Rubén Eslaiman y Alexis Guerrera— vienen multiplicando encuentros, aunque las señales hacia afuera muestran una negociación con pocos avances sólidos.
Aun así, en Unión por la Patria confían en que existe margen para acercar posiciones y trabajan en alternativas para sumar adhesiones. Una de las cartas en estudio es la oferta de tres sillas en el directorio del Banco Provincia, cuyos mandatos están vencidos. La propuesta apunta a repartir esos lugares entre la UCR, el PRO y Unión y Libertad, el bloque que lidera Martín Rozas y que mantiene un vínculo más flexible con el oficialismo.
En paralelo, el ministro de Economía, Pablo López, habría aceptado hablar sobre un Fondo para los intendentes, aunque no en los términos que reclamaban los bloques opositores. La discusión gira en torno al monto total y así la herramienta combinará un monto fijo con un porcentaje del endeudamiento, aunque quedaría por debajo del 8% planteado inicialmente.
LA PELEA DE LOS INTENDENTES Y LA PRESIÓN POR FIN DE AÑO
El rol de los intendentes es clave en esta pulseada. Jefes comunales de todos los signos vienen reclamando asistencia financiera urgente para afrontar diciembre, en un contexto de caída de recaudación y baja de la coparticipación. Con los aguinaldos en peligro en muchas comunas bonaerenses.
“Si no hay ayuda extraordinaria, muchos municipios no podrán pagar los aguinaldos”, sostuvo un intendente del Interior, que también pidió que la Provincia salde deudas con IOMA e IPS. La demanda es transversal: los municipios piden fondos de libre disponibilidad para cubrir gastos corrientes y cerrar el año sin sobresaltos.
Con el reparto de cargos en la Suprema Corte fuera de discusión —el Ejecutivo no piensa abrir esa negociación ahora—, el Banco Provincia, el Consejo de Educación, el IPS y empresas del Grupo Bapro aparecen como territorios posibles para destrabar acuerdos.
Mientras tanto, la comisión que preside De Jesús dará hoy la pelea preliminar: sin dictamen no hay sesión posible, y sin sesión, el paquete económico quedaría virtualmente condenado a una negociación contrarreloj la semana próxima.
QUÉ PIDE LA OPOSICIÓN Y POR QUÉ EL ACUERDO PARECE LEJANO
En el interbloque opositor coinciden en que el Presupuesto y la Ley Fiscal podrían aprobarse sin grandes sobresaltos, siempre que se introduzcan modificaciones puntuales. Pero el endeudamiento es otra historia. “Requiere un acuerdo global que hoy no está ni cerca”, reconocen. Hoy puede haber otro dictamen en minoría de la oposición.
A la complejidad se le suma la interna del propio oficialismo. Kicillof mantiene tensiones con La Cámpora, que también debe alinearse para que Unión por la Patria llegue unificada a la votación. Las conversaciones parecen más fluidas con intendentes y legisladores del peronismo no kirchnerista que con el sector que responde a Cristina Fernández de Kirchner. Desde la oposición sostienen “que ellos arreglen su quilombo interno, no nos van a llevar puesto y ellos no pueden unir la tropa”, afirma un radical de experiencia en rosca legislativa.
En el Senado, la vicegobernadora Verónica Magario, Katopodis y Cascallares llevan adelante las negociaciones de última instancia para garantizar que el paquete fiscal no naufrague al llegar a la Cámara Alta.
LAS CENTRALES SINDICALES METEN PRESIÓN Y ADVIERTEN SOBRE UNA CRISIS INMINENTE
En este clima de máxima tensión política, la CTA de los Trabajadores y la CTA Autónoma bonaerense sumaron un fuerte pronunciamiento en apoyo al Gobierno provincial. Exigieron la aprobación urgente de las tres leyes y alertaron que la demora legislativa “pone en serio riesgo el funcionamiento del Estado provincial”, afectando salud, educación, seguridad, obras públicas y el pago de salarios y aguinaldos.
Las centrales también denunciaron una “asfixia económica y financiera” producto de la política fiscal nacional y reclamaron el envío de fondos adeudados, que estiman en más de 13 billones de pesos. Además, cuestionaron a los bloques que condicionan el debate del Presupuesto a negociaciones por cargos en el Poder Judicial y el Banco Provincia, acusándolos de alinearse con “las políticas de ajuste y desguace del Estado”.

