Las recientes críticas realizadas por el conductor televisivo Marcelo Tinelli al gobierno nacional pusieron más que incómodo al diputado nacional y candidato a senador por la séptima sección del Frente de Todos Eduardo Bali Bucca.
“Todo lo que dicen después no lo cumplen” arremetió el animador y empresario televisivo y disparó munición pesada contra el gobierno de Alberto Fernández.
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El conductor de “Show Mach” estalló de bronca al tomar conocimiento del apoyo que le dio el embajador argentino en Chile al líder mapuche Jones Huala, una comunidad con la que ha tenido más de un inconveniente en torno a una posible “usurpación” de las tierras que Tinelli posee en la localidad de Esquel.
“No puedo creer que este gobierno defienda a este violento, que incendiaba oficinas públicas, que usurpaba propiedades privadas” lanzó para luego expresar su desilusión respecto al gobierno de Alberto Fernández: “Bah, en realidad no tengo que tener más expectativas” se resignó.
La relación entre Marcelo Tinelli y Bali Bucca
Las críticas del conductor de “Show Mach” pusieron en aprietos al diputado nacional y actual candidato del Frente de Todos a senador seccional, Eduardo Bali Bucca.
Desde el inicio de su carrera política en la ciudad de Bolívar, Marcelo Tinelli se convirtió en el “main sponsor” de Bucca y lo acompañó en su paso en la función pública que este inició como intendente de esa localidad bonaerense.
A partir de ese momento, ambos construyeron una sólida amistad. El arribo a la intendencia le consolidó la apuesta realizada por Tinelli a diversos proyectos empresariales, sociales y deportivos en su pago chico como el paso de “Ciudad de Bolívar” por la liga nacional de vóley o la implementación de la maratón internacional “Dino Hugo Tinelli” de la que el propio Bucca es participante y uno de los más efusivos promotores.
El sorpresivo regreso de “Bali” al Frente de Todos aún es mirado de reojo por la dirigencia regional y, mucho más, por el vecino de a pie. Su comportamiento oscilante y los cuestionamientos que hizo al kirchnerismo cuando emigró con Florencio Randazzo y luego fue candidato a gobernador de Roberto Lavagna, son conductas difíciles de entender para las personas ajenas a la política y dejan heridas que tardan en cicatrizar en los convencidos.
Necesitado de dar señales de confianza, su cercanía a Marcelo Tinelli puede desatar nuevos interrogantes.
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