Gimnasia, por contexto, está obligado a ganar para lograr regularidad. Ahora bien: si lo consigue el próximo viernes el mérito de la victoria será doble. Porque al equipo de Alejandro Orfila le tocará visitar a un adversario que no pierde en su casa hace 16 meses, donde además acumula 941 minutos sin recibir goles.
Deportivo Riestra ha convertido al Guillermo Laza en una fortaleza inexpugnable: no pierde allí desde el 24 de mayo de 2024, cuando Rosario Central le ganó 2-0 (Luca Martínez Dupuy y Fabricio Oviedo convirtieron los goles, a este punto históricos). A partir de ahí, el Malevo encadenó un invicto de 24 partidos. El último fue la victoria 2-0 ante Central Córdoba.

El equipo del Tata Benítez en este lapso ha ganado 13 partidos y empatado 11. Con otro dato que es sumamente significativo: apenas le convirtieron ocho goles, mientras que marcó 30. Sí: no sólo el estadio está blindado sino que allí, su arquero Ignacio Arce se transforma en figura prácticamente en cada partido.
Arce y una defensa impecable, el gran secreto
Defensivamente impermeable, con una enorme efectividad en las jugadas frontales y gran capacidad en el juego aéreo, Riestra logró sellarse para recibir apenas tres goles en los últimos 15 encuentros. Y lleva diez corridos sin que le metan uno: el último se lo hizo Defensa y Justicia, en febrero.
Tal es el invicto de Riestra en su casa que paso a paso se acerca al top: Banfield, entre 1951 y 1953, no perdió en su hogar durante 49 partidos. Aunque ahí pasaron dos años: Gimnasia, por caso, buscará romper esa marca en una cancha que tendrá a 3.000 hinchas esperando otra gran tarde local. El Lobo querrá aullar. Y hacer historia.
