“Todos tiramos para el mismo lado y tenemos la cabeza en el objetivo, que no se va a desviar nunca porque tenemos hambre de gloria”. Esas fueron palabras de Franco Mussis. Pero pudieron ser de cualquier integrante del plantel de Gimnasia.
Grupo. Es una de las palabras elegidas por todos en el Lobo para explicar este buen momento que atraviesa el equipo. Más de 30 jugadores, cuerpo técnico y colaboradores siendo uno solo.
Y para que se haya fortalecido de esa forma, la pretemporada tiene que ver en prácticamente todo. En Estancia Chica se fue forjando esta masa uniforme que olvidó los dolores de cabeza de los últimos meses del año pasado, los conflictos con Nicolás Cabrera y se comprometieron en salir adelante juntos.
Objetivo. Gimnasia quiere, necesita y debe volver a Primera División en junio. Y con ese mensaje que baja desde arriba, ninguno piensa en problemas económicos, futuras ventas o posibilidades de Selección. El grupo tiene hambre de gloria, como remarcó Mussis.
El plantel del Lobo hoy es un mix entre futbolistas experimentados y jóvenes producto de un excelente trabajo en la cantera. Y con esa solidaridad permanente entre sí, nadie piensa en otra cosa que en el máximo anhelo, dejándolo en claro en cada ocasión.