Ninguno de todos los jugadores que terminan contrato el próximo 31 de diciembre jugó tan poco en Gimnasia en 2025 como Franco Torres. Ninguno, tampoco, debió vivir lo que le tocó vivir en la presente temporada al delantero, que volvió en enero luego de jugar en Copiapó de Chile en calidad de cedido en 2024.
El atacante de 26 años había tenido una buena pretemporada, pero en el cierre de la misma, sufrió una dura lesión que lo marginó prácticamente por todo el año. En la práctica matutina del 22 de enero en Abasto sintió un fuerte dolor y luego se confirmó lo peor: rotura de ligamento cruzado anterior y ruptura de meniscos en la rodilla derecha.
De allí en más el año se convirtió en una carrera de recuperación para el atacante, que recién pudo volver a entrenar con normalidad durante el mes de agosto. Finalmente el día 30 de septiembre tuvo sus primeros minutos en un campo de juego, partiendo como titular en la victoria de la Reserva ante Talleres, con Fernando Zaniratto en el banco.

Finalmente en el mes de octubre pudo volver a tener minutos en Primera, en el último partido de Alejandro Orfila como DT de Gimnasia. Desde entonces jugó apenas 67 minutos, ingresando tres veces desde el banco de relevos, pero lo hizo dejando buenas sensaciones. De hecho en esos 67 minutos marcó dos goles.
Su regreso se produjo con 26 minutos en cancha ante Talleres por la fecha 12, sumando otros 16’ en la fecha 16 ante Platense. Finalmente su tercer y último juego se dio con Barracas Central en Cuartos de Final, cuando jugó los últimos 25. El detalle es que fue el encargado de sellar la victoria ante el Marrón poniendo el 3-0 y ante el Guapo anotando el 2-0.
Sus ingresos fueron tan buenos que muchos hinchas cuestionaron que no haya ingresado en la Semifinal ante Estudiantes, con el equipo abajo en el marcador tras el gol de Tiago Palacios. Más allá de eso, conscientes de su potencial y en vistas de la lesión que no le permitió tener la chance que merecía, desde el club apuestan a renovar su vínculo para 2026.


