La Selección de España consiguió un logro histórico ayer al derrotar a Inglaterra en la Final del Mundial Femenino 2023, para conquistar así su primera copa del mundo. Sin embargo luego del encuentro sucedió algo en los festejos de lo que se habló más que del triunfo en sí mismo.
Luis Rubiales, presidente de la Federación Española, sorprendió a propios y extraños en la entrega de medallas al tomar del rostro a Jenni Hermoso, una de las figuras del seleccionado, y darle un beso en la boca. Rápidamente las imágenes se volvieron virales y su accionar fue repudiado tanto en redes sociales como en los principales medios españoles.
Si bien en un primer momento la máxima autoridad de la RFEF le quitó importancia al hecho, diciendo que “idiotas hay en todas partes” y asegurando que no estaba “para gilipolleces”, finalmente horas más tarde y ante el eco mediático que tuvo el video, pidió disculpas.
“Seguramente me he equivocado, lo tengo que reconocer. En un momento de máxima efusividad, sin mala intención y sin ningún tipo de mala fe, ocurrió lo que ocurrió, de manera muy espontánea”, inició, ensayando unas disculpas que también fueron una justificación.
En ese mismo tenor agregó: “Aquí no se entendía porque lo veíamos algo natural, normal y para nada con ninguna mala fe, pero fuera parece que se ha formado un revuelo que si hay gente que se ha sentido por esto dañada, tengo que disculparme”.
“Hay que darle el mérito a esta mujeres, al equipo liderado por Jorge Vilda y esto se tiene que celebrar por todo lo alto. En lo que deberíamos centrarnos es en que han sido campeonas, que es único y que hay que disfrutarlo”, expresó luego, buscando trasladar nuevamente el foco de la información al histórico logro deportivo en el Mundial Femenino 2023.
¿Qué dijo Jenni Hermoso sobre la polémica?
“Eh, no me ha gustado. (…) ¿Pero qué hago yo? ¡Mírame a mí, mírame!”, fueron las primeras palabras de Jenni Hermoso, con risas de fondo, en un vivo dentro del vestuario mientras sus compañeras veían por primera vez las imágenes que se habían dado en el campo.
“Ni yo me lo esperaba…”, declaró luego a la cadena Cope, para luego minimizar lo ocurrido: “Ha sido la efusión del momento, que no hay nada más allá, y que se va a quedar en una anécdota y ya está, que la gente si le quiere dar bombo se lo va a dar y quien no, pues no”.
Por su parte la agencia de noticias EFE se hizo eco de unas supuestas declaraciones de la jugadora, facilitadas por la Federación: “Ha sido un gesto mutuo totalmente espontáneo por la alegría inmensa que da ganar un Mundial. El presi y yo tenemos una gran relación, su comportamiento con todas nosotras ha sido de diez y fue un gesto natural de cariño”.
El impacto en la política y el pedido de renuncia
Irene Montero, ministra de Igualdad del Gobierno de España en funciones, se expresó en Twitter y lo hizo de manera contundente, condenando el accionar de Luis Rubiales: “Es muy sencillo. Dos personas se besan si ambas quieren, si hay consentimiento”.
“No demos por hecho que dar un beso sin consentimiento es algo ‘que pasa’. Es una forma de violencia sexual que sufrimos las mujeres de forma cotidiana, hasta ahora invisible, y que no podemos normalizar. El consentimiento en el centro. Solo sí es sí”, indicó.
Por su parte desde la Generalitat de Catalunya se pidió remover del cargo al mandatario. Anna Caula, secretaria general de l’Esport, remarcó que el beso fue “una agresión dura” y advirtió: “Hay que tomar conciencia de que hay cosas que no son un precio que debamos pagar. La mirada en el fútbol aún no es igualitaria, nos queda mucho trabaja por hacer”.