Los clásicos del fútbol argentino suelen ser trascendentales para la vida deportiva de jugadores, técnicos e incluso dirigentes. Un partido que puede dejar grandes secuelas en el equipo derrotado y que en ocasiones a implicado el final de un ciclo de trabajo. Para los arqueros, un puesto con una exposición particular, una chance de brillar pero con mucho por perder.
Tanto Fernando Muslera para Estudiantes como Nelson Insfrán para Gimnasia se han convertido en piezas claves de sus equipos, siendo figuras en varias presentaciones y siendo fundamentales para la cosecha de puntos. El Clásico Platense será un nuevo desafío para ellos, uno disputándolo por primera vez y otro buscando revancha en UNO luego de una actuación para el olvido.
Muslera y un nuevo Clásico en su carrera
El experimentado arquero uruguayo llegó al Pincha en julio de este año y, como era de esperar, se adueñó rápidamente del arco. Desde entonces mostró toda su experiencia y jerarquía y, a pesar de no poder ayudar en los penales ante Flamengo, sus condiciones y su seguridad son una tranquilidad para sus compañeros y para el propio Domínguez.
Ante Gimnasia jugará su 38° derbi, luego de disputar diferentes clásicos en Uruguay, Italia y Turquía, y buscará estirar su racha positiva de 16 triunfos sobre 13 derrotas. Un arquero hecho para momentos de presión y que será uno de los grandes focos de la 190° edición del Clásico Platense.
Insfrán y una tarde para el olvido en UNO
El arquero del Lobo, en cambio, tiene un breve y caótico historial enfrentando a Estudiantes. Durante todos sus años en el club, el Mono estuvo presente en siete clásicos, cuatro de ellos en el banco de suplentes sin sumar minutos y los restantes tres dentro del campo de juego: dos empates una derrota. Los dos empates fueron en el Bosque, mientras que la derrota fue justamente en UNO.
Fue en la tarde que el equipo de Macelo Méndez recibió cuatro goles y que Insfrán vio la roja por un duro pisotón sobre Pablo Piatti, permitiendo que José Sosa, de penal, cierre el 4-1 en el Jorge Luis Hirschi. Una jugada que condenó al arquero tripero y que le costó varios meses en el banco de suplentes hasta que se ganó el puesto nuevamente.
Si bien volvió a jugar ante el Pincha en 2025, partido que terminó 1-1 en el Bosque, será su regreso a UNO, donde disputó un solo partido con la camiseta de Gimnasia y los recuerdos no son los mejores. Por ello, sin lugar a dudas, una revancha para el Mono, que buscará un mejor resultado que el sufrido anteriormente.