Gimnasia cambió radicalmente su imagen. El Lobo pasó de penar por la permanencia a asegurar la misma con un histórico triunfo ante River en el Monumental y los resultados que ayudaron en su causa. Todo eso se dio desde la llegada de Fernando Zaniratto, quien ahora prepara con los suyos nada menos que el mata-mata que lo tendrá frente a Unión en octavos de final.
Ante este panorama, el DT del Lobo pasó por los estudios de La Cielo y se refirió a los aspectos que debió tocar en los suyos para un presente que los tiene entre la alegría por la victoria ante Platense y la clasificación y la ilusión por dar el siguiente paso.

“Pensábamos sólo en salvarnos. Necesitábamos sacar puntos. No sabíamos con qué rival los íbamos a tener”, comenzó quien asumió como interino. “El resultado de River nos dio mucho aire. Y los jugadores agarraron muy rápido la idea, el orden y el sacrificio. El juego en equipo, que es lo más importante y lo que me gusta trabajar mucho. Y se fueron dando los resultados y estamos donde estamos”, agregó.
En cuanto a lo que fue la expectativa, siguiendo cada encuentro de los rivales directos desde cerca, el propio Lucho recordó el contexto. “Estábamos mirando el partido (por Banfield-Aldosivi). Vimos todo el partido. Hasta el último minuto estábamos salvados. Y después hace el gol Aldosivi y tuvimos que esperar a otro partido, que fue el de Atlético Tucumán”, remarcó. “Por suerte se dio ese resultado que nos daba la tranquilidad. Y pudimos jugar contra Vélez ya salvados”, indicó.
Acto seguido, el nacido en Saladillo se refirió a un aspecto clave que se pudo modificar con su llegar, la cabeza. “La cabeza de un deportista de elite es muy importante. Más allá de lo que trabajás en la semana, de lo físico, de los cuidados que puedas llegar a tener, si la cabeza no está bien, eso pasa a un segundo plano”, destacó.

“Es difícil entenderlo para algunos, pero si la cabeza está mal no te deja hacer lo que realmente sabés hacer. Es difícil de explicarlo también, porque todos dicen que por ser profesional tenés que tener una cabeza fuerte, que tenés que superar los malos momentos o dejar los problemas de lado. Pero no se puede. Muchas veces no se puede. Algunos sí y otros no”, agregó en ese sentido.
En lo que respecta al cambio, profundizó en las razones del mismo. “Se generó un lindo ambiente, mucha confianza entre ellos y nosotros. Se hablaron las cosas claras. Y creo que eso también ayuda”, reconoció. “Me han planteado algunos problemas ni bien agarramos, tratamos de plantear esas cosas que ellos tenían dudas y parece que funcionó”, destacó.

