Diego García fue denunciado por abuso sexual el pasado 24 de febrero y la UFI N°15 entiende en la investigación que ya tomó declaración a la denunciante, sus amigas y familiares y una decena de futbolistas de Estudiantes.
Desde entonces, la fiscal María Cecilia Corfield trabaja en la investigación del hecho y lo sucedido en la quinta de la localidad de Abasto en la que se encontraban varios jugadores del plantel profesional. García tiene impedimento de salir del país.
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El Pincha tiene que descontar varios puntos y la tabla no le juega a favor, pero tendrá por delante el doble de partidos en UNO, donde logró edificar una garantía en este semestre.
Estudiantes aplicó el protocolo elaborado por la Subsecretaría de Género y conocida la denuncia en la justicia, le prohibió al jugador entrenarse. Pero al tiempo, el abogado de Diego García presentó un pedido para que se le respete el derecho a trabajar y concedido, la denunciante expresó públicamente su descontento.
En los últimos días se conoció que el futbolista uruguayo fue transferido a préstamo a Talleres de Córdoba, para jugar la Copa Sudamericana, y su representación le solicitó a la fiscal que pueda salir del país. La parte que patrocina a la denunciante hizo un pedido de nulidad. Se espera resolución.
LA CARTA DE LA DENUNCIANTE DE DIEGO GARCÍA:
“Desde que nací soy de Estudiantes. Fui jugadora de hockey, representé la camiseta toda mi vida, adentro y afuera de la cancha. Siempre sentí que fue mi segunda familia y mi segunda casa, pero hoy lamentablemente no lo siento así. El club dejó de representarme en el mismo segundo que no supo defenderme ni cuidarme. Hoy en día me di de baja y no soy más socia justamente por esto. El club no tomó las medidas necesarias para cuidarme. Se resguardó en lo legal hablando de los derechos del denunciado, pero mis derechos se los olvidaron.
Sé lo que se habla, sé lo que se dice y a pesar de que sé que tengo el apoyo de muchos de ustedes, también sé que hay gente que cree que hago esto por dinero o por fama. Créanme que amaría que esta fuese la situación porque me ahorraría el trauma que me generó vivir todo eso, y mientras el jugador denunciado va a ser transferido a otro club en el cual podría salir del país para jugar una copa a mí me toca sufrir desde casa y estar con tratamiento psicológico, con mil miedos e inseguridades.
Por eso pido por este medio justicia y coherencia. Yo ya lo viví, ya el daño lo tengo, pero sigo fuerte y sigo con la denuncia en pie para que a otra no le toque vivir mi situación. Si Estudiantes es una escuela, enseñen primero a respetar a la mujer. Sean la familia que dicen ser”.
RICARDO CALLABA, ABOGADO DE LA DENUNCIANTE EN CIELOSPORTS:
“Lo último que hay en la causa es un pedido por parte del abogado del jugador para que pueda salir del país para jugar un partido con talleres por Copa Sudamericana.
Nosotros le hicimos un pedido al juez que no dé lugar y esperamos la decisión de la fiscal, lo cual nos indica a nosotros que debemos aguardar y si se lo conceden ir a la Cámara de Garantías y si no se lo conceden está ajustado a la prohibición que ya le impusieron.
Cuando hay un delito cuya pena es sobre este delito en particular, y cuando hay una prohibición de salir del país, no se autoriza ni siquiera por trabajo”.
No hay manera de que esta situación no termine en juicio oral. En plazos no lo podemos establecer por la pandemia, pero podría someterse a Diego García recién en el 2025.
Falta una pericia psicológica al jugador que se la van a realizar el 19 de mayo y después otra pericia psicológica a ella. Allí el juez deberá definir si García espera el juicio en libertad o detenido.
Este caso no hay ninguna duda que va a terminar en juicio. En este caso no se va a dar una posibilidad de juicio abreviado, porque eso prevé 16 años de prisión. Será escuchando a los testigos y las pruebas documentales y que el tribunal que toque que determine la culpabilidad de García o no.
La familia eran todos socios de Estudiantes y renunciaron. Ella y la hermana eran jugadoras del club y se fueron. Toda la familia está muy mal”.
