Fue la noticia que sacudió el ambiente de la AFA el último lunes, cuando se conoció que Estudiantes se quedaba afuera del Comité Ejecutivo a partir del 2025, en una determinación nacida desde el enfrentamiento que existe hoy entre Claudio Tapia y Juan Sebastián Verón.
De hecho, hasta el domingo, Estudiantes tenía asegurada su presencia en el tercer gobierno del presidente Tapia, hasta que llegó el gol mal anulado a Luciano Lollo contra Platense y la reacción de la Bruja desencadenó el enojo de la cúpula Tapista. Ahí fue que Pablo Toviggino, la mano derecha del presidente de la Tapia, activó el plan para echar al Pincha de la AFA.
No sólo eso, sino que ese lugar como primer vocal titular, que Estudiantes tenía con el vice Pascual Caiella como representante, se lo dieron a Mariano Cowen, el presidente de Gimnasia, que antes era vocal suplente. Una movida que no fue casual.
Ahora bien, ¿cómo tomaron en Estudiantes la salida de AFA? En principio, no es algo que se veía venir, porque está claro que hasta el mismo domingo mantenía su lugar en el nuevo período de gobierno que finalmente arrancará en marzo del 2025 (irá hasta marzo del 2029). Pero cuando el propio Toviggino se lo comunicó la decisión a Pascual Caiella como representante del club, terminó imponiéndose la sensación de que “esto en algún momento podía ocurrir”.
En el club no lo consideraron expresamente como una “declaración de guerra”, pero sí una situación que claramente marca de la grieta que hoy existe entre ambas conducciones. Sobre todo, también, a partir de esta apertura de Estudiantes al ingreso de capitales privados a los clubes, algo que desde la AFA rechazan enérgicamente.
Estudiantes, la AFA y ahora qué…
Por lo pronto, aun en este contexto de fuego cruzado, Estudiantes mantendrá su ubicación en el Comité Ejecutivo hasta marzo. Y además, tendrá representación en la Liga Profesional. Por lo cual, todavía tendrá presencia, voz y voto.
En ese sentido, además, tendrá una continuidad en la figura de Caiella, el vice del Pincha que tiene muchos años de trayectoria en AFA, que estuvo con todos y contra todos, y que tiene el respeto de Tapia y del resto de los dirigentes de Viamonte. Por lo cual, ese brazo se mantendrá, aun sin cargo nominal en el Comité Ejecutivo.
Es por eso que en Estudiantes la salida de la AFA no se tomó como un tema de gran preocupación. “Es cierto que es mejor ser parte, sin dudas, sobre todo porque somos uno de los clubes más importantes del fútbol argentino, pero vamos a estar bien”, confiaron en el club, que saben que, una vez afuera de Viamonte, igual podrán canalizar cualquier reclamo a través de la Liga Profesional.
¿Qué le sacará a Estudiantes quedarse afuera de la AFA a partir del 2025?
En principio, lo dicho, no hay una modificación radical. Estudiantes ya era mirado de reojo por la Asociación del Fútbol Argentino y eso no iba a cambiar, más en este escenario en el que a través de su presidente se mostró abierto al ingresos de inversiones privadas en el fútbol, algo que desde calle Viamonte cuestionaron y rechazaron a través de un comunicado que contó con el apoyo de FIFA y Conmebol.
En ese marco, lo que más afectará a Estudiantes es que no tendrá presencia física en las reuniones de Comité Ejecutivo. Es decir, no se tendrá de primera mano todo lo que se vaya a comunicar de manera oficial y tampoco tendrá la chance de expresarse en ese marco institucional. Pero a su vez, mantendrá un lazo con Caiella, quien supo moverse en este tiempo con habilidad y equilibrio dirigencial y tiene las puertas abiertas de Viamonte.



