Juan Sebastián Verón cerró el año con un mensaje profundo y cargado de contenido emocional. A través de una carta publicada en sus redes sociales, el presidente de Estudiantes hizo un repaso del 2025 que atravesó el club y lo definió sin rodeos: “este último año fue de lucha, de aprendizaje y de trascendencia”.
En su reflexión, la Brujita puso el foco en las raíces, la familia y los valores que marcaron su camino, pero también en la construcción colectiva. “No fue una lucha individual, sino colectiva”, remarcó, destacando la identidad de Estudiantes y principios como la dignidad, la constancia, el trabajo y la decisión de no claudicar ni permitir “que nos pisen la cabeza”.

El mensaje incluyó un fuerte agradecimiento a quienes acompañaron el proceso, tanto hinchas como no hinchas, además de amigos, dirigentes y trabajadores del club. Verón valoró a todos los que “tomaron esta causa como propia” y empujaron desde el lugar que les tocó ocupar, reafirmando la idea de un Estudiantes sostenido por el sentido de pertenencia.

También hubo un espacio especial para su familia. El presidente agradeció a sus hijos, a su compañera de vida y a sus padres, pilares que —según expresó— lo impulsan de manera constante en cada desafío que asume al frente del club.
Con la mirada puesta en lo que viene, Verón dejó en claro que el camino no se detiene. “Lo logrado fue enorme, pero el camino continúa”, escribió, y cerró con un mensaje de esperanza y compromiso: mismas raíces, mismos valores y más trabajo que nunca para ir por “un futuro mejor, juntos y de pie”. El deseo final fue claro: que el 2026 sea un gran año para todos los vinculados a Estudiantes.

