Gimnasia depositó sobre el fin de semana parte de la deuda que tiene con sus trabajadores y la dirigencia confía en poder completar los pagos por salarios adeudados durante el correr de los días. La situación se extendió mucho más que lo habitual, hubo retención de tareas por parte de los trabajadores y hasta una amenaza de paro total por parte del gremio que los nuclea.
A última hora del viernes y a primera hora del sábado los empleados del club empezaron a ver como parte del dinero depositado empezó a impactar en sus cuentas. De acuerdo a información extraoficial el dinero depositado alcanzó, en promedio, los 700.000 pesos.
La situación preocupa en todos los ámbitos del club, ya que varios empleados decidieron ausentarse de su puesto o realizar retención de tareas ante la falta de pago y desde el gremio Utedyc, que nuclea a la mayoría de los trabajadores del Lobo tuvieron diferentes reuniones con los dirigentes en busca de que le garanticen el pago de los haberes.
El conflicto con los proveedores
Gimnasia atraviesa una delicada situación económica, que se traduce en la deuda con los empleados de planta, que aún no percibieron su salario, pero que también escaló a la falta de pago de diferentes proveedores. Por tal motivo, este miércoles cuatro categorías de divisiones inferiores cambiaron de locación el entrenamiento.
Por la falta de pago del servicio de transporte este miércoles cuatro divisiones de Gimnasia, Novena, Octava, Séptima y Sexta, entrenaron de manera provisoria en el predio de El Bosquecito. mientras que las dos categorías más grandes, Cuarta y Quinta lo hicieron en Estancia Chica como es habitual.
De esta manera, la crisis económica que atraviesa el Lobo, llegó también a las divisiones juveniles, que tuvieron que desdoblar sus prácticas en dos predios, cambiando así la logística habitual de los jugadores de inferiores, que además, no contaron con la habitual indumentaria del club, ya que la utilería de cada categoría está en el predio de Abasto.