esLa situación es llamativa, particular, podría decirse inédita en todos sus sentidos. Un DT que acaba de salir campeón y que no puede asistir a una final de su equipo por un compromiso personal pautado desde hace tiempo. Y encima, quien lo reemplaza, es ídolo en el club contrario y además lo dirigió, no pudiendo ganar ningún partido.
Pues bien, todo eso pasará entre Estudiantes–Vélez y Leandro Desábato como protagonista en esta final por el Trofeo de Campeones. El Chavo será el entrenador del Fortín este sábado a la noche en el Madre de Ciudades de Santiago porque Gustavo Quinteros, el DT principal, no podrá estar presente porque su hija se casará en Buenos Aires.
Lo curioso es que el Chavo fue DT de Estudiantes en el 2020. Y no le fue para nada bien. De hecho, lo dicho: se fue sin poder cosechar triunfos en el Pincha. Fueron 10 partidos, con siete derrotas y tres empates. En cuanto a los goles, la producción también fue floja: 11 en contra y sólo dos a favor.
La pandemia le jugó en contra a Desábato
Es cierto, el Chavo asumió en marzo del 2020 y luego llegó la pandemia, que paró el fútbol y lo complicó todo. “Habíamos pensado en un equipo con Rojo, Mascherano, la Gata y después de la pandemia nos quedamos sin nada”, dijo el DT en ese momento. Fue un atenuante real.
La cuestión es que después de una derrota por 2 a 1 ante Defensa y Justicia, dejó de ser el entrenador. Y el que lo reemplazó en esa ocasión fue el Ruso Zielinski.
La curiosa situación que podría vivir Desábado justo con el Pincha
Luego, su carrera como técnico siguió en el Ascenso, en Almagro, donde dirigió 13 partidos, ganó cuatro, empató tres y perdió seis. Y fue tras otra fallida experiencia como DT solista que tomó la decisión de sumarse al cuerpo técnico de su primo, Gustavo Quinteros, en Vélez.
Allí, ya vivió una final contra el Pincha, la de la Copa de la Liga, algo que sin dudas fue una situación incómoda para él. Sin embargo, no estuvo en primer plano, como le tocará estar este sábado, parado frente a la línea de cal, dando indicaciones.
Lo curioso, y también lo increíble es que el Chavo podría lograr justo ante Estudiantes su primer triunfo como DT en Primera y nada menos que en una final por un título. Otra rareza que tendrá una final en la que tendrá todos los condimentos posibles.