La Asociación del Fútbol Argentino (AFA) deberá cumplir una sanción impuesta por FIFA para el partido de la Selección Argentina frente a Venezuela en el Monumental. La medida consiste en destinar una tribuna entera a niños y organizaciones sociales, en el marco de los castigos por cantos racistas en encuentros previos. Esta decisión, si bien no supuso un aumento directo en el valor de los tickets, sí reduce la cantidad de lugares disponibles para el público general y podría generar que la demanda se concentre en los sectores más buscados.
De esta manera, aunque los precios se mantienen en línea con partidos anteriores, la sensación de encarecimiento puede aparecer porque muchos hinchas tendrán que recurrir a ubicaciones más caras o, en algunos casos, a la reventa. El efecto inmediato de la sanción, entonces, no está en la suba oficial de los valores, sino en la menor oferta de localidades accesibles.
Precios de las entradas para Argentina – Venezuela:
- Popular: $90.000
- Popular Menor: $29.000
- Plateas Sívori y Centenario Alta: $158.000
- Plateas Sívori y Centenario Media: $320.000
- San Martín y Belgrano Alta: $260.000
- San Martín y Belgrano Media: $480.000
- San Martín y Belgrano Baja: $450.000
El punto que más preocupa a los hinchas es la posibilidad de que, al agotarse rápido las entradas más económicas, quede como única opción desembolsar cifras mucho más altas en plateas medias o bajas. Esa situación, aunque no responde a un aumento oficial, sí afecta al bolsillo del simpatizante promedio que busca estar cerca de la Selección.
A esto se suma la expectativa generada por el equipo de Lionel Scaloni, que juega cada presentación como si fuese una fiesta nacional. La demanda para ver a Messi y compañía suele superar ampliamente la oferta, por lo que cualquier restricción en la capacidad del estadio termina potenciando la presión sobre el sistema de venta.
Finalmente, el tema de la reventa vuelve a escena: con menos localidades disponibles para el público general, las plataformas informales tienden a disparar los valores. Es allí donde el “encarecimiento real” puede sentirse con más fuerza, ya que en esos circuitos los precios suelen multiplicarse respecto de los oficiales y hacen casi imposible el acceso para miles de hinchas.