El sumo pontífice de la Iglesia Católica, el Papa Francisco, decidió aprobar los decretos que inician el proceso de canonización para Carlo Acutis, un joven de nacionalidad italiana fallecido a causa de leucemia en el año 2006, a la edad de 15 años.
Carlos Acutis, nacido en Londres el 3 de mayo de 1991, fue un estudiante italiano que se dedicó a la programación y a la informática. Acutis logró estrechar los lazos entre la fé católica y el mundo de la información, consolidándose como uno de los primeros “influencers” del catolicismo. Se dedicó a la tarea de documentar milagros eucarísticos y apariciones de la Virgen María alrededor del mundo, catalogando y clasificando toda esta información en su sitio web.
Acutis presentó una inclinación temprana hacia a Dios, participando desde su formación primaria en todo tipo de actividades sociales de la Iglesia. Entre las acciones que lo destacaban como un ferviente creyente y prácticante, se encontraban el ahorro de dinero para la gente humilde y sin hogar y la asistencia en diferentes comedores populares y hogares de ancianos. El beato fue diagnosticado de leucemia tipo M3 a principios de octubre del 2006, falleciendo tres días después del diagnóstico, el 12 de octubre del 2016.
Recientemente, se reconocieron milagros atribuidos a la figura del joven, quien fue declarado beato en el año 2020 por la máxima autoridad de la Iglesia.
Los milagros del joven beato
El primer milagro que se le atribuye a Acutis la inexplicable curación de un niño en Brasil en el 2020, que estando afectado por páncreas anular se encontraba vomitando permanentemente en un cuadro que generaría la muerte segura del infante. Al momento de tocar la reliquia de Carlo, el niño rezó por su curación, y a partir de ese momento, no vomitó más. Este es el primer milagro por el cual beatificaron al joven influencer.
El segundo milagro por el cual se evalúa su santidad es por la inesperada recuperación de una joven costarricense que sufrió un accidente en de bicicleta, en el año 2022. La muchacha tuvo que ser intervenida por el personal médico a raíz de un traumatismo craneoencefálico grave, de la cual la expectativa de supervivencia era casi nula. En ese contexto, la madre de la joven decidió rezarle al joven beato por la recuperación de su hija, quien repentinamente recuperó la movilidad y el habla a los pocos días.
