Como ya sucedió en paritarias anteriores, Roberto Baradel vuelve a ser el elegido de quienes cuestionan los paros docentes, a pesar de que son varios los representantes de los maestros que están involucrados. Esta vez, las críticas al titular del gremio SUTEBA partieron desde un diario de Coronel Suárez y con una virulencia que generó todo tipo de repudios.
Fue en la edición del sábado del Nuevo Día que apareció una caricatura de Baradel con un revólver apuntándole -firmada por “Yapita”-. El texto que acompañaba el dibujo, era de José Luis Dégele y, directamente, rozaba la apología del delito.
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“Las clases comenzarán sólo cuando el gobierno decida implementar la cláusula gatillo. Parece que el ministro de Educación ha tomado nota”, señalaba la pieza de ¿humor gráfigo?.
Rápidamente, desde SUTEBA Coronel Suárez salieron a rechazar la publicación. “La viñeta es la viva expresión del odio de clase que tiene un sector de la población, no sólo en la ciudad de Coronel Suárez, sino en toda la Argentina, dirigido especialmente hacia el pueblo trabajador”, señalaron desde el sindicato suarence.
“Por todo esto -agregaron-, consideramos que la bala que apunta al profesor Roberto Baradel es una acción más que se suma a una serie de amenazas dirigidas a su persona y a sus familiares, nunca investigadas por el gobierno actual, y que siempre se intensifican en momentos de las negociaciones paritarias”.
La misma portura tomaron desde la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE-CTERA): “El artículo gráfico firmado por José Luis Dégele no sólo constituye una apología del delito sino que se inscribe en una campaña de agresiones, amedrentamiento y amenazas a Roby Baradel y su familia iniciada hace más de un año y recrudecida cada vez que se desarrollan las discusiones paritarias”.
Los colectivos de educadores se refieren a la discusión salarial de 2017, donde Baradel fue duramente señalado por el gobierno de María Eugenia Vidal y de Mauricio Macri. Mientras desde la Provincia insistían en que respondía el kirchnerismo, el Presidente llegó a nombrarlo en el inicio de las sesiones ordinarias, minimizando las amenazas de muerte que había recibido el gremialista y por las que tenía custodia policial.
“Para cuidar a los docentes (…) no creo que Baradel necesite que nadie lo cuide”, había dicho el Jefe Estado Frente a la Asamblea Legislativa. En ese momento, hasta dirigentes de Cambiemos salieron a plantear reparos con esa frase porque una hija de Baradel había recibido horas antes un mail anónimo intimidante.
“Decile a Baradel que acepte el valor de la paritaria propuesta o vas a ser boleta vos y tus hermanos”, decía el texto proveniente desde una casilla fantasma. Tras conocerse ese episodio el propio ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, lo visitó y le ofreció “solaridad y garantías”.
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