Entre la 1:30, horario del comienzo de la sesión y las 3:18 de la madrugada, se dieron una serie de discurso, pero fueron luego de votar, algo que la diputada Laura Cano Kelly (Frente de Izquierda) cuestionó duramente la metodología de votar y luego exponer las razones.
El diputado Gustavo Pulti defendió la autorización de endeudamiento remarcando que Buenos Aires es “la última provincia” en acceder al crédito, luego de que 16 jurisdicciones, incluida la Ciudad de Buenos Aires, tomaran nuevos préstamos entre junio de 2024 y junio de 2025. Señaló que la Provincia estuvo “privada del presupuesto, de la ley fiscal y del acceso al crédito” el año pasado, aun cuando debió afrontar vencimientos heredados del gobierno de María Eugenia Vidal. Además, cruzó los argumentos opositores sobre el endeudamiento nacional y subrayó que el Estado argentino incrementó su pasivo en más de 120.000 millones de dólares, apoyándose en informes oficiales: “No son aseveraciones caprichosas, lo publica el boletín mensual del Ministerio de Economía”, afirmó. En ese marco, precisó que el monto pedido por la Provincia “representa apenas el 2,48% del total de la deuda que tomó el Estado Nacional”, pese a que Buenos Aires aporta “el 38% de los ingresos fiscales y la mayor cantidad de dólares del país”.
En su defensa política del proyecto, Pulti sostuvo que el financiamiento se tramita “por los canales institucionales correspondientes”, en contraste con el endeudamiento nacional que, según denunció, “no pasó por el Congreso de la Nación y no tuvo ningún debate”. También aclaró que el 70% del crédito solicitado se destinará a cancelar vencimientos de gestiones anteriores, y destacó que la administración actual redujo el peso de la deuda provincial del 9% del Producto Bruto Geográfico en 2019 al 6% en 2025. Agradeció el acompañamiento opositor y subrayó la solvencia fiscal para asumir el compromiso: “La Provincia puede afrontarlo perfectamente bien”, dijo. Frente a un Estado nacional con un pasivo del 70% del PBI, planteó que la solicitud bonaerense es moderada, transparente y acorde a la capacidad económica provincial.
TIGNANELLI AGRADECIÓ, PERO NO SE OLVIDÓ DE MANDARLE UN MENSAJE AL GOBRNADOR
En su intervención durante la maratónica sesión, el diputado Facundo Tignanelli defendió la ley de financiamiento y destacó el trabajo que permitió alcanzar los consensos necesarios. Comenzó agradeciendo “a los trabajadores y trabajadoras de la Cámara que estuvieron en estas últimas 48 horas a disposición”, y valoró que el debate se haya dado “de manera seria, encontrando los consensos” que requiere una norma que precisa los dos tercios. También señaló un aprendizaje respecto del año pasado: “Mandarlo en tres textos distintos permitió debatirlo por separado y en mayor profundidad”. Para Tignanelli, la aprobación en Diputados es clave para afrontar la desfinanciación nacional: recordó que “la deuda que tiene el Estado Nacional con la provincia se acrecienta todos los días” y que la ley permitirá “dar respuesta a muchas de las carencias que está generando el gobierno nacional”.
En otro tramo, Tignanelli destacó la tarea del presidente de la Cámara, de la Comisión de Presupuesto y de los funcionarios del Ejecutivo que participaron del debate, como el ministro Gabriel Katopodis y el diputado-intendente Mariano Cascallares. Remarcó que estuvieron “permanentemente a disposición” para evacuar dudas y ajustar la letra del proyecto. También agradeció a los bloques opositores que acompañaron la iniciativa, reconociendo que “la mayoría que se requiere para este tipo de ley necesita tiempo, trabajo y voluntad”.
Finalmente, celebró que el oficialismo haya logrado aprobar todos los proyectos enviados por el Ejecutivo, en un claro mensaje para adentro de la interna peronista: “Hoy aprobamos el proyecto número 10; el Poder Ejecutivo mandó 10 proyectos y nuestro bloque, con 37 diputados sobre 92, logró aprobar los 10”. Cerró con un mensaje político hacia adelante: “Aunque al gobierno nacional no le guste, vamos a seguir sosteniendo a la provincia de pie”.
Y UN DÍA EL TUITERO AGUSTÍN ROMO HABLÓ
El diputado Agustín Romo (LLA) cuestionó duramente el paquete fiscal aprobado por la Legislatura y afirmó que, tras “una semana de sesiones largas e intensas”, el trabajo realizado “no fue para hacerle la vida mejor a los bonaerenses, sino al gobierno de la provincia de Buenos Aires”. Remarcó que se votó “un presupuesto con déficit fiscal”, una ley impositiva “con aumento de impuestos” y un endeudamiento que, según sostuvo, “no es un simple rollover”, sino “deuda nueva” destinada —según su interpretación— a “pagar la candidatura presidencial del gobernador Kicillof”.
En ese sentido, denunció que la mayoría especial para aprobar el financiamiento se está construyendo “subastando el banco público de todos los bonaerenses”, lo que a su juicio demuestra “una desconexión total y absoluta” de la Cámara con la ciudadanía.

Romo también criticó que el endeudamiento le otorgue al Ejecutivo “un pase libre para no tener que volver acá nunca más por lo que le queda del mandato”, pese a que “tanto se habla de República, instituciones y controles”. Cuestionó la creación de nuevos cargos para garantizar apoyos legislativos y advirtió que mientras “la gente claramente quiere menos gasto público”, en las últimas sesiones “aumentaron el gasto, los impuestos y la deuda”.
Finalmente, reiteró que su bloque no acompañará ninguna de estas leyes y anticipó que “la Libertad Avanza va a gobernar la provincia de Buenos Aires”, confiando en que el crecimiento del espacio continúe a partir de la próxima sesión.
LA UCR ACOMPAÑÓ GRACIAS A LOS CAMBIOS EN EL TEXTO
El diputado Diego Garciarena (UCR-Cambio Federal) comenzó su intervención cuestionando las críticas hacia los acuerdos parlamentarios y defendió que “la construcción de mayorías requiere de acuerdos”, especialmente en un cuerpo colegiado donde se necesitan consensos amplios. Señaló que no corresponde hablar de “acuerdos oscuros” o “actitudes pseudo extorsivas”, ya que —dijo— todos los bloques acuerdan y “pareciera que los acuerdos que hacen algunos están bien y los que hacen otros están mal”. En esa línea remarcó que la mayoría alcanzada supera “el 66,66% de la Cámara”, algo que sólo se logra cuando los bloques minoritarios tienen posibilidad real de negociar. Sostuvo que lo verdaderamente oscuro sería “que un diputado vaya a pedir plata por una ley”, no la discusión abierta sobre “fondos para intendentes y cargos que requieren participación de la oposición”, que —enfatizó— siempre se pusieron “arriba de la mesa”.

Garciarena también defendió los cambios conseguidos por su bancada en la ley de financiamiento, destacando que la negociación “larga, tediosa y agotadora” permitió modificar uno de los puntos centrales: el fondo para los municipios. Recordó que su bloque pidió hace dos meses “un fondo de monto determinado, actualizable, con cronograma de pagos y de libre disponibilidad”, en lugar del esquema original que ataba el monto al endeudamiento y lo volvía “absolutamente indeterminado”. Si bien admitió que no lograron el “100% de lo que queríamos”, celebró que el texto final garantice que “la mayor parte del fondo esté cubierta por rentas generales”, lo que brinda previsibilidad a los 135 distritos sobre cuánto recibirán y cuándo lo cobrarán. En ese marco, justificó su acompañamiento al endeudamiento como resultado de un acuerdo político transparente y favorable para los municipios.
PARA CASTELLO EL ENDEUDAMIENTO ES “INMORAL”
El diputado de La Libertad Avanza Guillermo Castello defendió el voto negativo del bloque al endeudamiento al afirmar que la Legislatura está “inventando un eufemismo” al llamar ley de financiamiento a lo que, según él, “ya se votó con el presupuesto”. Sostuvo que la toma de deuda es “incompatible con la democracia”, citando a Thomas Jefferson, porque compromete el patrimonio de generaciones futuras “que no están presentes ni participaron del proceso político”. Para Castello, el endeudamiento es “profundamente inmoral” y debería ser prohibido junto con el déficit fiscal, ya que —según argumentó— esos dos factores explican los “eternos problemas históricos” de la Argentina.
También apuntó directamente contra Axel Kicillof, a quien acusó de ser “un irresponsable fiscal” que prioriza “vivir de prestado” y sostiene un “fetiche del Estado presente” que ya no puede financiarse con recursos corrientes. “La deuda son impuestos futuros; le están robando el futuro a los jóvenes”, lanzó, asegurando que el endeudamiento compromete la gestión del próximo gobernador, que él espera “sea liberal”. Para contrastar modelos, repasó cifras de deuda de distintos gobiernos nacionales y destacó que Milei “lleva un desendeudamiento de 36.560 millones de dólares”, un camino que —anticipó— debería imitar la provincia en los próximos años.
EL PRO SOSTUVO QUE ES UNA HERRAMIENTA NECESARIA, PERO SIN LA INFORMACIÓN CORRECTA
El diputado del PRO Agustín Forchieri explicó su rechazo al endeudamiento señalando que, si bien la provincia necesita “cancelar y renegociar deudas existentes” para cumplir compromisos previos, el proyecto carece de información clave. Valoró el acuerdo alcanzado para fortalecer el fondo destinado a los municipios —“son el primer mostrador de los reclamos de los vecinos”, dijo— y aseguró que su bloque está conforme con la forma en que finalmente se definirán esos recursos. Sin embargo, remarcó que el oficialismo no brindó un detalle elemental: “Hubiese estado bueno tener un anexo que explique para qué va a ser ese nuevo endeudamiento”.
Forchieri sostuvo que, de existir ese listado, podría evaluarse con mayor claridad si la deuda financiará “obras viales, infraestructura o hidráulica” o inversiones que mejoren servicios esenciales. Pero advirtió que “claramente” la intención del Ejecutivo es otra: “¿Para qué quiere tomar más deuda el gobernador si no es para generar más impuestos?”, cuestionó. Recordó que la provincia gastó 85 mil millones de pesos “en una elección desdoblada por un capricho del Gobernador”, mientras la Legislatura discute desde hace un año boleta única en papel. Y cerró con un mensaje directo: su bloque no acompañará “una nueva deuda sin un anexo detallado de para qué la vamos a dar”, ante el temor de que financie iniciativas como “una empresa farmacéutica con mayor participación estatal”, que a su juicio no representan las prioridades de la ciudadanía.
SOMOS SENTÓ SU POSICIÓN
El diputado Matías Civale, jefe del bloque SOMOS BUENOS AIRES, defendió la ley de financiamiento resaltando el clima de acuerdos alcanzado durante un año “complejo y electoral”, y puso en valor que la Cámara haya logrado “la búsqueda permanente de consensos”. Para contextualizar su postura, citó al Milei opositor, quien sostenía que “la deuda pública es inmoral, implica que la fiesta del gasto público sea financiada por generaciones que no solo no han votado, sino que no nacieron”, y recordó el teorema de Raúl Baglini: “cuanto más lejos se está del poder, más irresponsables son los enunciados políticos”. Desde ese marco, reivindicó que su bloque actúa “con responsabilidad”, acompañando presupuesto, impositiva y ahora el financiamiento, porque —remarcó— “era de una irresponsabilidad fiscal muy importante no sancionar esta ley” al haberse aprobado un presupuesto con déficit.
En cuanto al contenido del endeudamiento, Civale subrayó tres puntos clave. Primero, que “el 77% de lo autorizado para 2026 es para pagar deuda que vence ese mismo año”, porcentaje que sería mayor si se sumaran los vencimientos 2025 que la Provincia afrontó sin autorización legislativa. Segundo, destacó el acuerdo que permitió crear un fondo para municipios de $360.000 millones, y sostuvo que, descontando letras y rollover, “casi el 50% de la nueva deuda se destina a los municipios”, algo que consideró fundamental para quienes defienden la autonomía local. Tercero, respondió a las críticas opositoras aclarando que quienes acusan de “degenerados fiscales” al acompañar la ley son los mismos que reclaman bajar impuestos en un contexto donde “el 70% de los recursos queda en manos del Estado Nacional” y donde la deuda nacional crece sin obras ni alivio para provincias y municipios. “Los únicos que han festejado esa deuda son los especuladores financieros”, advirtió, al remarcar que la carga recae sobre los gobiernos locales y sobre quienes han perdido cobertura de salud y servicios básicos.
LOS DIALOGUISTAS APOYARON EL ENDEUDAMIENTO Y EXPLICARON POR QUÉ
El diputado Martín Rozas (Unión y Libertad) destacó el clima de acuerdos alcanzado tras “un día largo, un día intenso” y celebró que la Cámara haya podido “trabajar y buscar los consensos necesarios” para otorgarle al Ejecutivo herramientas que mejoren la situación de los bonaerenses. Subrayó que la realidad provincial “es difícil, es dura, está complicada”, por lo que resulta imprescindible que el gobernador cuente con recursos para asistir a la población. En esa línea, reivindicó que Unión y Libertad “siempre estuvo en la búsqueda de consensos, de tender puentes y de garantizar la gobernabilidad”, y enmarcó su voto positivo en ese compromiso.
Rozas aclaró, no obstante, que el endeudamiento “no tiene que ser un cheque en blanco para la provincia”. Por eso destacó el trabajo en la comisión de Presupuesto y la inclusión —a instancias de su bloque— de una comisión bicameral de seguimiento, integrada por seis diputados y seis senadores, destinada a “controlar los recursos y la deuda pública” y evitar que “los esfuerzos de los bonaerenses sean malgastados”. Finalmente, agradeció a todos los bloques por las negociaciones de las últimas semanas y celebró que se haya logrado “la mejor ley de financiamiento para poder ayudar a los ciudadanos de la provincia de Buenos Aires”.
PARA NUEVOS AIRES HUBO UNA DEBATE RESPONSABLE
El diputado Gustavo Cuervo, del bloque Nuevos Aires, sostuvo que desde el inicio su espacio fijó “una posición clara” frente a los proyectos enviados por el Ejecutivo. Explicó que consideraban “indispensable avanzar en los acuerdos necesarios” para no repetir la situación irregular del año pasado y evitar que la provincia, los municipios y la ciudadanía quedaran sin herramientas “que brindan certeza y seguridad jurídica”. Cuervo reconoció que el texto original era “básicamente razonable”, pero señaló que varios planteos de la oposición debían ser atendidos. Aunque cuestionó que el debate “se extendió mucho más de lo necesario” y que incluso derivó en actitudes “pseudoentorpecedoras” de algunos sectores, celebró que finalmente se alcanzara un entendimiento.
En esa línea, llamó a consolidar una práctica parlamentaria basada en el “debate responsable y la discusión honesta”, recordando que la oposición tiene el deber de controlar y proponer alternativas, pero no de “hacer oposición por la oposición misma”. Destacó además que el país viene de dos procesos electorales —provincial y nacional— que se desarrollaron “con absoluta normalidad y total transparencia”, lo que obliga a ambas partes a generar ámbitos de diálogo. Para Cuervo, es imprescindible encontrar acuerdos mínimos en temas institucionales y de gobernabilidad, sobre todo cuando las fuerzas más votadas son oficialismo en una jurisdicción y principal oposición en la otra. “Seguiremos trabajando para generar consensos”, afirmó, convencido de que actuar con esa lógica “honra el rol de legislador” y da sentido al trabajo en las bancas.
DURISÍMO DISCURSO DE LAURA CANO KELLY
La diputada de PTS-Frente de Izquierda Unidad, Laura Cano Kelly, fundamentó su rechazo al endeudamiento con un duro discurso en el que calificó el proceso legislativo como “bochornoso” y un “espectáculo obsceno”. Cuestionó que se haya votado “sin tener el texto final” y consideró que eso constituye “un atentado contra la democracia”. También apuntó contra las fuerzas que acompañaron la iniciativa: “Cada uno de los diputados presentes se tiene que hacer cargo de lo que acaba de pasar”, afirmó, y remarcó que la llamada ley de financiamiento es “lisa y llanamente un endeudamiento”, al que vinculó directamente con “sometimiento”. Para Cano Kelly, el gobierno busca tomar deuda para cubrir los pasivos heredados de la gestión de María Eugenia Vidal, a los que calificó como “una estafa total para la provincia y para las familias trabajadoras”.
Además, denunció que durante la discusión hubo “chantajes de uno y otro lado”, negociaciones “de espaldas al pueblo” y presiones para condicionar fondos municipales y el pago a estatales. Cuestionó también la aparición de nuevos cargos acordados “por trascendidos” en organismos como el Banco Provincia y el Tribunal Fiscal, mientras —según remarcó— no se crea ningún puesto para áreas sensibles: “No crean un solo cargo para maestras, auxiliares o trabajadores becarios”, dijo. La legisladora insistió en que la Legislatura vive un “festival de obscenidad” y responsabilizó a la clase política por el avance de discursos de derecha: “No avanzan porque sí; avanzan porque los dejan avanzar”, cerró.

