El superclásico del fútbol argentino tendrá el domingo una nueva edición, en este caso en la Bombonera, y de alguna forma empezó a jugarse. Y fue en la conferencia organizada por la Liga, que tuvo a dos pesos pesados: Leandro Paredes, campeón del mundo con la Selección, por el lado de Boca; y Juanfer Quintero, figura de River y jugador de la selección colombiana. Pero también a dicho evento fueron convocados los presidentes de ambos clubes, aunque hubo una ausencia llamativa: la de Juan Román Riquelme.
Sí, el presidente de Boca no estuvo y de alguna forma plantó a Claudio Tapia, el presidente de la AFA, que quería hacer con ambos mandatarios un anuncio particular. ¿Cuál? Que en la lista de Lionel Scaloni para el amistoso de este 14 de noviembre contra Angola no habrá citados del fútbol local. Y eso liberaba nada menos que a Paredes, por el lado de Boca, y a Marcos Acuña y a Lautaro Rivero, por el de River.
“Hablamos con el Gringo Scaloni la posibilidad de que no sean convocados los jugadores del fútbol argentino de los equipos que el día domingo tengan posibilidades o definan situaciones deportivas. Esto queríamos comunicarles, realmente creo que también es darle la importancia que tiene que tener el fútbol argentino“, señaló Tapia, que estuvo acompañado solamente por Stéfano Di Carlo, flamante mandatario de River, a quien de paso le dio la bienvenida como tal.
Pero la otra silla quedó vacía, porque allí debía estar Riquelme, quien mandó en su lugar a Marcelo Delgado, mano derecho y hombre encargado del fútbol. Obviamente, Tapia tomó la decisión de que, ante el plantón de Román, no hubiera representación de Boca en ese anuncio, por lo que la situación quedó realmente extraña.

¿Por qué Riquelme no estuvo? No hubo explicación oficial del club, por eso a todas luces lo de Riquelme fue un desplante no sólo al evento (que la Liga dignificó convocando a figuras relevantes del partido) sino también al propio presidente de la AFA, que quería tener a los dos presidentes en una conferencia a la que también asistió Nicolás Ramírez, el árbitro del Súper, en una presencia inédita, porque nunca había pasado que estuviera el juez del partido.
Sobre la ausencia de Román, Miguel Ángel Rubio, gerente de comunicación de la Liga Profesional de Fútbol de la AFA, explicó en ESPN: “Estaba invitado, no sé qué pasó… Él mismo habló con Tapia”.
Paredes y Juanfer
Antes, claro, hablaron los jugadores. El capitán y figura de Boca jugará su primer superclásico como titular, ya que en su anterior etapa siempre había sido suplente: “Es el superclásico más importante de mi carrera. Poder ganar y clasificarnos a la próxima Libertadores es uno de los objetivos que tenemos. Sería grandioso poder hacerlo ante River”, dijo Paredes.
Por su lado, Juanfer Quintero se refirió a la situación del equipo y de Gallardo: “Tenemos una gran oportunidad. Es el momento para dar un golpe en la mesa…”, dijo primero, marcando el mal momento de River, que viene de perder contra Gimnasia. Y agregó: La historia de River, en mucha mayoría y en un gran porcentaje la ha hecho Marcelo. Jamás le soltaríamos la mano”, sostuvo el colombiano.

