La situación de la empresa metalúrgica EMEPA continúa en crisis, pese a que gran parte de la política local está acompañando el reclamo que por ahora no tiene respuesta.
Por eso, el intendente Javier Gastón convocó a los diferentes presidentes de los bloques políticos para detallar las gestiones realizadas frente al Ministerio de Transporte que conduce Guillermo Dietrich, así como de otras empresas locales en similar situación.
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Es que la fábrica había conseguido la posibilidad de subsistir a partir de un contrato con ese ministerio para la reparación de vagones. Ese acuerdo debía renovarse, pero el gobierno el soltó la mano al municipio, dejando a más de 80 operarios con un pie en la calle.
Según pudo saber este medio, hasta el momento la audiencia solicitada al ministro Dietrich no fue contestada.
Desde el municipio consideran que el “principal problema es el modelo productivo actual” que afecta directamente a la industria nacional y las Pymes locales.
Sin embargo, como en el caso de UNITEC, en EMEPA, la UOM -gremio que agrupa a los operarios- tuvo un rol muy cercano al interés empresarial, limitándose a garantizar el cobro del 100 por ciento de las indemnizaciones a cambio del “silencio” de sus afiliados.
Por eso, frente al silencio del gobierno nacional y la falta de herramientas que posee el gobierno municipal, la situación de la empresa metalúrgica pende de un hilo.
Para colmo, el pasado lunes 11 venció la conciliación obligatoria dictada por el ministerio de Trabajo en el marco del conflicto con la empresa.
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