Desolador. El futuro para cerca de 600 trabajadores de la planta ensambladora de calzados Paquetá de Chivilcoy, es incierto y cada vez más angustiante.
Tras una reunión entre el viceministro del Interior, Sebastián De Luca, representantes de la empresa Adidas y Paquetá y funcionarios del ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, se resolvió un cuarto intermedio para seguir buscando una solución al conflicto.
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Pero por ahora, Adidas no da señales de querer seguir invirtiendo y la estabilidad de la empresa local pende de un hilo. La situación se repite: en 2018, la multinacional también abandonó Esteban Echeverría y una empresa tuvo que cerrar.
Entre las –tristes- alternativas que se barajan por estas horas, se estimó la posibilidad de que la marca ponga a disposición 200 retiros voluntarios, en el cual se abone el 140 por ciento del sueldo.
“La realidad nos está dando cachetadas día a día frente a la pérdida de puestos laborales. Después del Estado municipal, Paquetá es la fuente de trabajo más grande de Chivilcoy”, retrató con angustia Juan López, delegado gremial de la empresa de calzado.
Si se tiene en cuenta que por cada trabajador hay al menos cuatro personas en su familia, la estadística muestra que el cierre de Paquetá representará 3,5 por ciento de la población total de la localidad.
Hace poco, el Concejo Deliberante de Chivilcoy sancionó la ordenanza de Emergencia Laboral en el distrito, pero el intendente Guillermo Britos promulgó sólo el primer artículo. Finalmente, la oposición consiguió que también se incluyera la eximición de tasas para desocupados y la creación de una mesa de seguimiento laboral.
Es que el ambiente político local no es el mejor para enfrentar la adversidad. Mientras el jefe comunal se acerca sigilosamente al oficialismo, un concejal de Cambiemos amenaza con irse del bloque en caso de que no se pueda evitar el cierre de Paquetá.
Por su parte, gremios como la CGT y la CTA, realizarán el futuro lunes una volanteada por la ruta 5 para difundir el drama que pesa sobre los hombros de 594 trabajadores.
Por ahora, los trabajadores continúan ingresando a la fábrica pero ya hay una fecha para que Adidas resuelva quedarse o irse: el 20 diciembre. Hasta ese día, los trabajadores deberán esperar para conocer su destino laboral.
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