Daniel Sancho, hijo del actor Rodolfo Sancho, famoso en Argentina, entre otras por producciones como “El Ministerio del Tiempo”, ya está en la cárcel en Tailandia por matar al cirujano plástico colombiano Edwin Arrieta de 44 años, quien se pudo confirmar que era su “Sugar Daddy” o “amante mayor adinerado”.
El caso está conmocionando a España y al mundo entero por los hechos violentos en los que se involucró al joven.
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Sancho, quien es chef, amante de los viajes y de la buena vida, fue detenido por haber matado al médico cirujano Edwin Arrieta Arteaga mientras se encontraban juntos de vacaciones en Tailandia.
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En las primeras imágenes del último fin de semana que se publicaron de Daniel Sancho se lo puede ver en la habitación de su hotel, donde se estaba alojando y donde tuvo lugar el crimen.
Daniel Sancho fue detenido por la policía tailandesa el pasado 4 de agosto, después de que se encontraran restos humanos en una bolsa de fertilizantes cerca de un hotel en la isla de Koh Phangan. Los restos pertenecían a Edwin Arrieta, quien había viajado a Tailandia con Daniel Sancho, según el imputado “como amigo y socio”.
LOS HECHOS
Según el diario de Tailandia Bangkok Post, poco después de que Daniel recogiera a Edwin en el puerto local, habrían ido al hotel, donde el médico “quiso mantener relaciones sexuales” con él.
Al negarse, en un “arrebato de ira”, el joven español le habría dado una trompada que hizo que la víctima cayera y perdiera el conocimiento golpeándose con el borde de la bañera en la cabeza.
Las autoridades de Tailandia revisaron la habitación de hotel y encontraron varias evidencias, según la información la policía encontró el lugar muy limpio, pero las tuberías estaban con restos de pelo, grasa y sangre.
Según las versiones de los familiares y amigos de ambos, Daniel Sancho y Edwin Arrieta se conocieron hace unos meses en Colombia, cuando el español fue al país “cafetero” para hacer negocios con el médico. Arrieta le ofreció a Sancho participar en una clínica de cirugía estética que iba a inaugurar en Montería, la ciudad natal del colombiano. Sancho aceptó la propuesta y se quedó en Colombia durante tres meses, compartiendo el apartamento de Arrieta.
Sin embargo, la historia cambió radicalmente cuando Daniel Sancho fue arrestado por la policía tailandesa. El joven confesó haber matado a Arrieta, pero alegó que lo hizo en defensa propia, porque el médico lo tenía secuestrado y quería violarlo.
Según Sancho, Arrieta estaba obsesionado con él y lo engañó para que lo acompañara a Tailandia, donde lo encerró en una habitación de hotel. El día del crimen, Sancho dijo que Arrieta intentó abusar de él y que él reaccionó golpeándolo con un objeto contundente en la cabeza. Luego, entró en pánico y decidió cortar el cuerpo con un cuchillo y una sierra eléctrica para eliminar las evidencias.
SOY CULPABLE, PERO…
Después de su detención, Daniel Sancho confesó el crimen. “Soy culpable, pero yo era el rehén de Edwin. Me tenía como rehén. Era una jaula de cristal, pero era una jaula. Me hizo destruir la relación con mi novia, me ha obligado a hacer cosas que nunca hubiera hecho“, aseguró, además de confirmar que su vínculo no era amoroso, algo que luego la evidencia dejó de lado.
“Él estaba obsesionado conmigo. Me engañó, me hizo creer que lo que quería era hacer negocios conmigo“, comentó Sancho a EFE.
La policía tailandesa no cree la versión de Sancho y lo acusa de homicidio premeditado. Los agentes encontraron pruebas que contradicen su relato, como el hecho de que Sancho limpió la habitación con lavandina y detergentes, trató de quemar algunas pertenencias de Arrieta y usó su tarjeta de crédito para comprar comida y bebida. Además, las cámaras de seguridad del hotel muestran que Sancho salió varias veces del lugar con bolsas que contenían los restos del médico. Los investigadores también sospechan que Sancho tenía intenciones de robarle a Arrieta el dinero que había invertido en la clínica.
El joven español, hijo del famoso actor, y nieto de otro artista ya fallecido protagonista de la recordada serie “Curro Jiménez”, ingresó este lunes en la cárcel de Koh Samui, en el sur de Tailandia, después de que un juez del tribunal provincial de la isla decretara prisión provisional para el joven por el presunto asesinato del colombiano Edwin Arrieta.
LA VÍCTIMA
Según el periódico español El País, Edwin Arrieta nació en Lorica. Su madre ejercía como profesora y su padre se dedicaba a reparar aparatos electrónicos, pero actualmente ambos están jubilados. Las autoridades locales lo consideraban un “buen vecino”.
De acuerdo con El Espectador de Colombia, el profesional estudió medicina en la Universidad Metropolitana de Barranquilla y obtuvo el título de cirujano plástico en la Universidad de Buenos Aires. Unos meses más tarde, el doctor instaló una exitosa consulta en Montería, donde se dedicaba a trabajar con pacientes “generalmente sanos, que no se sienten a gusto con su cuerpo”.
El caso genera una gran consternación tanto en España como en Colombia, donde las familias y los amigos de los implicados no entienden lo ocurrido.
El actor Rodolfo Sancho viajó a Tailandia para estar cerca de su hijo y contratar un abogado que lo defienda. El padre del joven pidió respeto para su familia y se abstuvo de emitir juicios precipitados sobre lo sucedido.
Por su parte, los familiares y colegas de Arrieta lo recordaron como un profesional exitoso, un buen vecino y una persona generosa y solidaria.
Lo último que se sabe sobre el caso es que este martes 8 de agosto, un juez tailandés ordenó el ingreso en prisión preventiva de Sancho, quien tendrá que esperar al menos seis meses para enfrentarse al juicio.
Si es declarado culpable, podría enfrentarse a una pena máxima de muerte o cadena perpetua.
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