En el marco de la investigación por el crimen de un jubilado de 82 años ocurrido el 3 de noviembre pasado en la localidad bonaerense de Castelar, cuando lo hallaron carbonizado, ahora cayó una joven de 18 años, hija de la presunta viuda negra, informaron fuentes judiciales.
A la joven se le imputa el homicidio de Santos Salvador Maciel (82), hecho por el que está detenida su madre, de 49 años, quien, según testigos, mantenía una relación sentimental con la víctima.
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Es que tras el crimen, en la casa de la mayor de las mujeres, situada a tres cuadras de la del jubilado, los pesquisas de la DDI de Morón encontraron un televisor LED y un horno eléctrico robados del garaje de la vivienda de la víctima, ubicada en Alfredo Bufano al 3.600, de Castelar Sur.
A raíz de ese hallazgo quedó presa la dueña de esa casa y, tras diversas diligencias, el fiscal de Morón Sergio Dileo, a cargo de la causa, dispuso el arresto de la hija de la mujer como partícipe del mismo hecho.
La joven fue localizada en una vivienda de la localidad de Cuartel V, de Moreno, donde se encontraba escondida desde el día del crimen, añadieron los voceros.
Un elemento fundamental para imputarla en la causa fue el análisis de las imágenes de las cámaras de seguridad de la zona, en la que se ve a madre e hija cuando entran a la casa de Maciel la madrugada del crimen.
Para el fiscal, ambas mujeres le robaron electrodomésticos y dinero al dueño de casa y luego prendieron fuego la propiedad.
El jubilado fue hallado carbonizado en su cama y se aguardan resultados complementarios de la autopsia para saber si previamente había sido atacado o le habían suministrado alguna sustancia para inmovilizarlo.
El hecho fue descubierto la madrugada del martes 3 de noviembre último, adonde llegaron policías de la seccional de Castelar y bomberos alertados por un incendio.
La última detenida serpa indagada en las próximas horas por el fiscal del caso.
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