Los últimos mercados de pases no trajeron consigo grandes erogaciones en Estudiantes, teniendo en cuenta que las arcas del club están centradas de lleno en el Estadio de 1 y 57, y por eso apostó a lo que tiene, dándoles mayor lugar a los chicos de la cantera.
Con poco recambio y una notoria disminución en la cantidad de variantes a disposición, este semestre arrojó un problema que no encuentra solución: las lesiones. El Pincha sufrió y sufre a cada entrenamiento, y el afectado de esta semana fue Iván Gómez.
La cantidad de jugadores lesionados que padeció el Pincha durante los menos de tres meses que se llevan transcurridos en este 2019 evidencia deficiencias en la preparación que tuvo lugar durante la pretemporada, en donde, salta a la vista, se exigió de más desde lo físico.
NOMBRE POR NOMBRE
La primera víctima fue Iván Erquiaga, con una lesión de grado 1 en el isquiotibial derecho luego del debut con Vélez. La fecha siguiente se sumó Matías Pellegrini, quien fue suplente ante San Martín de San Juan por una sobrecarga y acabó con una lesión de grado 2 en el bíceps crural derecho.
En el medio varios futbolistas sufrieron lesiones menores, sobrecargas y tendinitis, que los obligaron a perderse algún partido. En esa lista ingresaron varios de los más grandes, como Rodrigo Braña, Pablo Lugüercio, Gastón Fernández y Mariano Pavone, junto a Facundo Mura.
La tercera baja de gravedad fue Iván Gómez, con una lesión de grado 2 en el bíceps femoral izquierdo en la antesala del tercer partido, con Patronato, y luego lo siguió Facundo Sánchez, que se perdió el encuentro siguiente ante Argentinos por una molestia muscular.
A comienzos de este mes Erquiaga volvió a lesionarse, esta vez en el bíceps de la pierna izquierda, y en la previa del Clásico fue baja el Chapu Braña, que no pudo jugarlo por culpa de una lesión de grado 2 en el músculo semi membranoso de la pierna izquierda.