Hablar de Gonzalo Piñeiro es hacerlo sobre un mediocampista central categoría 2000 que viene de tener un año positivo en la Primera de Estudiantes, disputando 12 partidos (5 como titular) y marcando un gol. En las últimas horas el volante habló en diálogo con el área de prensa del club sobre sus primeros pasos y también sobre su 2022 en Liga Profesional.
“Para mí el fútbol, cuando era chico, era un hobby. Jugaba de defensor pero no le daba mucha importancia a la posición, jugaba para divertirme”, recordó el futbolista oriundo de Florencio Varela, que llegó al club en 2011 luego de una prueba en la vieja cancha auxiliar que tenía el Estadio Jorge Luis Hirschi sobre 1 y 54.
Sobre aquellos primeros pasos en el club Gonzalo Piñeiro destacó el rol que tuvieron puntualmente dos de los entrenadores que lo dirigieron en el comienzo de su vínculo con Estudiantes: “Empecé en Pre novena. El primer año estuve con Mauro Amato y Gabriel San Millán, aprendí un montón de ellos”.
“Fue un lindo año, lleno de experiencia. Espero que sirva para el año que viene poder afianzarme en el plantel y tener más minutos en cancha, tratando siempre de dar lo mejor”, afirmó luego al poner la mira en su presente, luego de un año que lo vio ganar terreno tras haber jugado solo un partido previamente.
En ese sentido recordó, como uno de sus mejores momentos en 2022, el agónico 2-2 con los pibes ante Colón en Santa Fe por Liga Profesional: “Éramos los pibes esa noche. Al haber estado con chicos que vengo jugando desde inferiores, nos ayudó a que estemos más tranquilos y no tuvimos tanta presión”.
“Se acostumbra a que el estudio va por un lado y el fútbol por otro. Pero acá no es así. Y estar en el Country todo el día te hace vincularte más con el club y conocer en profundidad a tus compañeros y entrenadores”, observó también, poniendo el foco en su vínculo con Estudiantes más allá del campo de juego.